• - Señora... Ambos sabemos que ese saco de arroz no vale lo que usted me está pidiendo.- Decía algo frustrado al ver que la vendedora no da su brazo a torcer.

    Kazuo había bajado a la ciudad que estaba al piel del monte Inari (Kyoto feudal) para comprar algunos víveres. Pero la vendedora era muy obstinada y vendía el arroz a más precio del que correspondía. Esta era una mujer de avanzada edad, arrugada como una pasa seca. En cambio el zorro lucia una apariencia totalmente humana, pasando desapercibido hasta que sus ojos eran avistados, ese color azul intenso llamaba la atención aunque este no la deseará.

    Kazuo respira hondo y cambia el semblante de su rostro. Hace alago de toda su galantería y le sonríe de una forma suave pero arrolladora. La anciana intenta reprimir una sonrisita nerviosa mientras intenta alisar los pliegues de su yukata.

    - Vamos señora Takana, ya sabe que soy un humilde monje en el santuario. ¿no me haría este pequeño favor?.- Le decía con leve sonrisa picarona. Evitaba hacer relucir sus encantos en público, pero todo sea por el buen regateo.

    La señora Takana finalmente cede, extendiéndole a Kazuo el saco de arroz mientras esta tomaba el dinero de la mano del joven.

    -Siempre terminas convenciéndome muchacho, no se cómo lo haces. A veces pienso que usas brujería contra mi.- Decía esta finalmente con una sonrisa en los labios, claramente encantada con la actitud de Kazuo hacia ella.

    -Ya sabe que estos encantos solo los reservo para usted señora Takana. Que Inari la acompañe.* Decía Kazuo sin perder esa sonrisa cautivadora. La escena no pasa del todo desarpecivida, ya que un grupo de jovenes casaderas cuchicheaban y reían de forma suave mirando a Kazuo. Este hace una leve inclinación hacia ellas a modo de respetuosa despedida. Esto hace que incluso una de ellas profiera un gritito de emoción, haciendo que el resto de las jovenes se revoluonaran a un más.

    El zorro continuo su paso entre las calles, algunas estrechas en dirección al resto de comercios para hacer sus compras.
    - Señora... Ambos sabemos que ese saco de arroz no vale lo que usted me está pidiendo.- Decía algo frustrado al ver que la vendedora no da su brazo a torcer. Kazuo había bajado a la ciudad que estaba al piel del monte Inari (Kyoto feudal) para comprar algunos víveres. Pero la vendedora era muy obstinada y vendía el arroz a más precio del que correspondía. Esta era una mujer de avanzada edad, arrugada como una pasa seca. En cambio el zorro lucia una apariencia totalmente humana, pasando desapercibido hasta que sus ojos eran avistados, ese color azul intenso llamaba la atención aunque este no la deseará. Kazuo respira hondo y cambia el semblante de su rostro. Hace alago de toda su galantería y le sonríe de una forma suave pero arrolladora. La anciana intenta reprimir una sonrisita nerviosa mientras intenta alisar los pliegues de su yukata. - Vamos señora Takana, ya sabe que soy un humilde monje en el santuario. ¿no me haría este pequeño favor?.- Le decía con leve sonrisa picarona. Evitaba hacer relucir sus encantos en público, pero todo sea por el buen regateo. La señora Takana finalmente cede, extendiéndole a Kazuo el saco de arroz mientras esta tomaba el dinero de la mano del joven. -Siempre terminas convenciéndome muchacho, no se cómo lo haces. A veces pienso que usas brujería contra mi.- Decía esta finalmente con una sonrisa en los labios, claramente encantada con la actitud de Kazuo hacia ella. -Ya sabe que estos encantos solo los reservo para usted señora Takana. Que Inari la acompañe.* Decía Kazuo sin perder esa sonrisa cautivadora. La escena no pasa del todo desarpecivida, ya que un grupo de jovenes casaderas cuchicheaban y reían de forma suave mirando a Kazuo. Este hace una leve inclinación hacia ellas a modo de respetuosa despedida. Esto hace que incluso una de ellas profiera un gritito de emoción, haciendo que el resto de las jovenes se revoluonaran a un más. El zorro continuo su paso entre las calles, algunas estrechas en dirección al resto de comercios para hacer sus compras.
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
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    En un mundo donde las almas están conectadas por hilos invisibles, el destino de cada persona está ligado a otra mediante un frágil hilo rojo; sin embargo, algunos hilos no son eternos. Sora, ha pasado toda su vida cuidando y protegiendo su propio hilo rojo, el cual la conectaba con su amor de infancia. La promesa de estar siempre juntos la mantuvo con esperanza durante los años.

    Un día, mientras caminaba por el prado donde solían encontrarse, Sora siente que algo está mal, el hilo que la conectaba con su otra mitad se vuelve más débil, más frágil, como si estuviera a punto de romperse. Desesperada, sigue el hilo con sus dedos temblorosos, su corazón latiendo más rápido con cada paso que da. Al llegar al final, encuentra un sobre, dentro de él, una carta de despedida, el hilo que había sostenido con tanto amor, ahora solo le trae un profundo vacío.

    "Lo siento", lee en la carta, mientras las lágrimas comienzan a deslizarse por su rostro. El destino que una vez pensó que estaba sellado, se desvaneció frente a sus ojos, y con ello, el hilo que alguna vez la conectó a la persona que más amaba, finalmente se rompe.

    Off: No voy a rolear esto pero quería intentar un inicio de rol de romance a ver que tal porque nunca he hecho esta wea XD

    En un mundo donde las almas están conectadas por hilos invisibles, el destino de cada persona está ligado a otra mediante un frágil hilo rojo; sin embargo, algunos hilos no son eternos. Sora, ha pasado toda su vida cuidando y protegiendo su propio hilo rojo, el cual la conectaba con su amor de infancia. La promesa de estar siempre juntos la mantuvo con esperanza durante los años. Un día, mientras caminaba por el prado donde solían encontrarse, Sora siente que algo está mal, el hilo que la conectaba con su otra mitad se vuelve más débil, más frágil, como si estuviera a punto de romperse. Desesperada, sigue el hilo con sus dedos temblorosos, su corazón latiendo más rápido con cada paso que da. Al llegar al final, encuentra un sobre, dentro de él, una carta de despedida, el hilo que había sostenido con tanto amor, ahora solo le trae un profundo vacío. "Lo siento", lee en la carta, mientras las lágrimas comienzan a deslizarse por su rostro. El destino que una vez pensó que estaba sellado, se desvaneció frente a sus ojos, y con ello, el hilo que alguna vez la conectó a la persona que más amaba, finalmente se rompe. Off: No voy a rolear esto pero quería intentar un inicio de rol de romance a ver que tal porque nunca he hecho esta wea XD
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  • {Luego de aquel ataque le quedaba claro que las cosas debian cambiar. La estaban buscando a ella. Si se quedaba en el circo solo los pondria en riesgo. Asi que solo quedaba una solucion. Ellos se irian a otra ciudad, y ella viajaria por su cuenta a un lugar donde nadie la conociera}

    {Y asi al dia siguiente llegaria el momento de la despedida. Se intercambiaron abrazos, se derramaron lagrimas y se deseo suerte. Pero mas importante ella les prometio que daria lo mejor de si misma para ayudar a otras personas. Desde ahora asumiria completamente su papel como justiciera como su unica identidad}

    {En la despedida final vestia lo que desde ahora su ´´uniforme´´. Y con una gran sonrisa se despidio de ellos. Y comenzo su viaje a una nueva vida. No tenia forma de saberlo pero terminaria conociendo a mas personas como ella que compartian sus ideales y formarian un grupo juntas}
    {Luego de aquel ataque le quedaba claro que las cosas debian cambiar. La estaban buscando a ella. Si se quedaba en el circo solo los pondria en riesgo. Asi que solo quedaba una solucion. Ellos se irian a otra ciudad, y ella viajaria por su cuenta a un lugar donde nadie la conociera} {Y asi al dia siguiente llegaria el momento de la despedida. Se intercambiaron abrazos, se derramaron lagrimas y se deseo suerte. Pero mas importante ella les prometio que daria lo mejor de si misma para ayudar a otras personas. Desde ahora asumiria completamente su papel como justiciera como su unica identidad} {En la despedida final vestia lo que desde ahora su ´´uniforme´´. Y con una gran sonrisa se despidio de ellos. Y comenzo su viaje a una nueva vida. No tenia forma de saberlo pero terminaria conociendo a mas personas como ella que compartian sus ideales y formarian un grupo juntas}
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  • Escribiré canciones a las estrellas mirando a la luna, no me olvidare de ninguna de ellas, aún cuando su luz sea por mucho más bella, porque su magia es un reflejo del Sol que le ama, y ​​en las noches sirve de guía a las almas. que luchan por causas perdidas, nacimos solos y solos moriremos, detrás de nosotros no dejaremos más que recuerdos, mi deseo es que mi mal muera con migo y que mis hijos hereden mi poca bondad, sueño con mi castillo en el cielo, para mí no existe gloria, no existe alegría, solo versos plasmados en un cuento de fantasía que nunca termina, mi mejor amiga es la codicia, mi orgullo es la fuerza que me inspira, no tengo nada que pueda llamar mio, ninguna es mia y de ninguna soy pertenencias, soy un alma de fuego con el corazón de acero, viviré mi tiempo, a mi despedida no atare ningun lamento, anhelo la eternidad, anhelo el hogar donde pueda descansar y encontrar la paz.
    Escribiré canciones a las estrellas mirando a la luna, no me olvidare de ninguna de ellas, aún cuando su luz sea por mucho más bella, porque su magia es un reflejo del Sol que le ama, y ​​en las noches sirve de guía a las almas. que luchan por causas perdidas, nacimos solos y solos moriremos, detrás de nosotros no dejaremos más que recuerdos, mi deseo es que mi mal muera con migo y que mis hijos hereden mi poca bondad, sueño con mi castillo en el cielo, para mí no existe gloria, no existe alegría, solo versos plasmados en un cuento de fantasía que nunca termina, mi mejor amiga es la codicia, mi orgullo es la fuerza que me inspira, no tengo nada que pueda llamar mio, ninguna es mia y de ninguna soy pertenencias, soy un alma de fuego con el corazón de acero, viviré mi tiempo, a mi despedida no atare ningun lamento, anhelo la eternidad, anhelo el hogar donde pueda descansar y encontrar la paz.
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  • Basilios.. mi pueblo, su corazón palpita como uno con el mío, yo su amado, protector y verdugo, él que les cuida y castiga, si uno me tiene por ejemplo entonces muera con su espada empuñada y no viva con miedo ninguno, preferible es la muerte antes que vivir en la deshonra, Basilio si alguno te avergüenza corta su cabeza y encuentra en su muerte la redención y el camino para sanar tus penas, vive y conquista pero no te enamores de ilusiones que lleven a tu casa decepciónes, sonríe en tu ultimo dia y llora con el corazón mi despedida.
    Basilios.. mi pueblo, su corazón palpita como uno con el mío, yo su amado, protector y verdugo, él que les cuida y castiga, si uno me tiene por ejemplo entonces muera con su espada empuñada y no viva con miedo ninguno, preferible es la muerte antes que vivir en la deshonra, Basilio si alguno te avergüenza corta su cabeza y encuentra en su muerte la redención y el camino para sanar tus penas, vive y conquista pero no te enamores de ilusiones que lleven a tu casa decepciónes, sonríe en tu ultimo dia y llora con el corazón mi despedida.
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  • Listo con todo lo que necesitaba para su viaje, Mair se embarcó en su no muy larga travesía hacia "Estrella Blanca". Con cada paso que daba, los recuerdos del pasado parecían revivir en su mente, trayendo consigo una mezcla de emociones que hacía tiempo no experimentaba.

    -Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que visité esa ciudad...

    Murmuró para sí mismo, mientras una suave brisa acariciaba su rostro

    -Será interesante ver cómo han cambiado las cosas, y también ver viejos rostros que creí haber dejado atrás. Me pregunto si ellos sentirán lo mismo al verme.

    Añadió, con una sonrisa teñida de nostalgia.

    El bosque que rodeaba el camino estaba impregnado de la frescura matinal, con el canto de los pájaros acompañando sus pensamientos. Mair no pudo evitar recordar los momentos que vivió en "Estrella Blanca", un lugar que una vez fue su refugio y que ahora lo llamaba de nuevo. Las risas compartidas, las amistades forjadas, e incluso las despedidas dolorosas, todo volvía a él con una claridad sorprendente.

    -Nunca pensé que volvería... pero aquí estoy, ansioso por ver qué me depara este reencuentro.

    Reflexionó, mientras esperaba ver la silueta de la ciudad en el horizonte.

    Con una mezcla de alegría y ansiedad, Mair continuó su camino, sabiendo que este viaje no solo lo llevaría de regreso a un lugar físico, sino también a un rincón de su corazón que había quedado olvidado por mucho tiempo.
    Listo con todo lo que necesitaba para su viaje, Mair se embarcó en su no muy larga travesía hacia "Estrella Blanca". Con cada paso que daba, los recuerdos del pasado parecían revivir en su mente, trayendo consigo una mezcla de emociones que hacía tiempo no experimentaba. -Ha pasado tanto tiempo desde la última vez que visité esa ciudad... Murmuró para sí mismo, mientras una suave brisa acariciaba su rostro -Será interesante ver cómo han cambiado las cosas, y también ver viejos rostros que creí haber dejado atrás. Me pregunto si ellos sentirán lo mismo al verme. Añadió, con una sonrisa teñida de nostalgia. El bosque que rodeaba el camino estaba impregnado de la frescura matinal, con el canto de los pájaros acompañando sus pensamientos. Mair no pudo evitar recordar los momentos que vivió en "Estrella Blanca", un lugar que una vez fue su refugio y que ahora lo llamaba de nuevo. Las risas compartidas, las amistades forjadas, e incluso las despedidas dolorosas, todo volvía a él con una claridad sorprendente. -Nunca pensé que volvería... pero aquí estoy, ansioso por ver qué me depara este reencuentro. Reflexionó, mientras esperaba ver la silueta de la ciudad en el horizonte. Con una mezcla de alegría y ansiedad, Mair continuó su camino, sabiendo que este viaje no solo lo llevaría de regreso a un lugar físico, sino también a un rincón de su corazón que había quedado olvidado por mucho tiempo.
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  • +en un claro junto al lago, Jack se inclina sobre una pequeña cajita de madera, abriéndola lentamente, dentro habia una bufanda roja cuidadosamente doblada y un par de katares, los toma con una mezcla de respeto y melancolía, recordando a quien una vez los empuño, eran parte de una historia que había llegado a su fin, tras un momento de reflexión, Jack se levanta, llevando la cajita al borde del lago, con una última mirada a los objetos, pronuncia en voz baja+

    Esto es lo más cercano a una despedida que tendrás, tu camino se ha detenido, pero yo aún debo continuar el mío, que encuentres paz, donde sea que estés

    +Con esas palabras, suelta la caja en el agua, observando cómo flota brevemente antes de hundirse bajo la superficie, saca una botella de cerveza, destapándola con un chasquido y levantándola en un pequeño homenaje+
    +en un claro junto al lago, Jack se inclina sobre una pequeña cajita de madera, abriéndola lentamente, dentro habia una bufanda roja cuidadosamente doblada y un par de katares, los toma con una mezcla de respeto y melancolía, recordando a quien una vez los empuño, eran parte de una historia que había llegado a su fin, tras un momento de reflexión, Jack se levanta, llevando la cajita al borde del lago, con una última mirada a los objetos, pronuncia en voz baja+ Esto es lo más cercano a una despedida que tendrás, tu camino se ha detenido, pero yo aún debo continuar el mío, que encuentres paz, donde sea que estés +Con esas palabras, suelta la caja en el agua, observando cómo flota brevemente antes de hundirse bajo la superficie, saca una botella de cerveza, destapándola con un chasquido y levantándola en un pequeño homenaje+
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  • 𝐈𝐧𝐟𝐚𝐧𝐜𝐢𝐚

    En un pequeño pueblo rodeado de bosques y colinas, vivía una familia que destacaba no solo por su bondad, sino también por su aspecto peculiar. Skuld, la hija menor, había heredado características de sus ancestros tiefling, ojos brillantes y cuernos curvados, excepto su piel, la cual mantenía esa tonalidad rosácea típica de los humanos. A diferencia de sus padres, Ada y Tormund, y su hermano mayor, Eirik, que tenían apariencias humanas comunes, Skuld era un recordatorio constante de una herencia ancestral que muchos en el pueblo preferían olvidar.

    Desde su nacimiento, Ada y Tormund protegieron a Skuld con todo su amor y cuidado. Sabían que el mundo fuera de su hogar podía ser cruel, pero estaban decididos a enseñarle a su hija que su singularidad era una fortaleza, no una debilidad. Eirik, siempre el hermano protector, jugaba con Skuld y la defendía de las miradas y susurros de los aldeanos.

    Sin embargo, la malicia y el miedo de los habitantes del pueblo no tardaron en manifestarse. Los niños evitaban jugar con Skuld y algunos adultos incluso advertían a sus propios hijos que se mantuvieran alejados de la "niña demonio". Los rumores se esparcieron como el fuego, sugiriendo que la familia de Skuld estaba maldita, y que su presencia traería desdicha a la comunidad.

    Cada día, Skuld enfrentaba miradas de desprecio y palabras hirientes. Su corazón joven se llenaba de tristeza, y a menudo se refugiaba en el bosque cercano, donde encontraba consuelo en la naturaleza y en los animales que no la juzgaban por su apariencia. En esos momentos, Ada la encontraba y la abrazaba, recordándole que era amada y que su familia siempre estaría a su lado.

    Una noche, los aldeanos, incitados por el miedo y la superstición, decidieron confrontar a la familia. Con antorchas y armas improvisadas, se reunieron frente a la casa de Skuld, exigiendo que se marcharan. Tormund, con Eirik a su lado, salió a enfrentarlos, intentando calmar la multitud con palabras de paz y razón. Pero el odio era demasiado profundo.

    Fue en ese momento que Skuld, tomando valor de la fuerza y amor que su familia le había dado, salió de la casa y se paró junto a su padre y hermano. Con voz firme, les habló a los aldeanos, no con odio, sino con una sabiduría y compasión que desarmó su ira. Les recordó que todos eran diferentes a su manera y que el miedo solo los dividía.

    Aunque no todos los corazones fueron cambiados esa noche, algunos empezaron a ver más allá de su apariencia. Con el tiempo, la familia de Skuld demostró ser una parte invaluable de la comunidad, y lentamente, las heridas comenzaron a sanar.

    A medida que Skuld crecía, su interés por la magia y el deseo de aprender más sobre sus habilidades se hicieron más fuertes. Sus padres, reconociendo su talento innato y queriendo lo mejor para ella, contactaron con una prestigiosa escuela de hechicería en una ciudad lejana. Con el apoyo incondicional de su familia, Skuld se despidió de su hogar y de aquellos pocos que habían llegado a aceptarla.

    La despedida fue agridulce, llena de lágrimas y abrazos. Ada y Tormund le recordaron que siempre estarían orgullosos de ella, mientras Eirik, con una sonrisa y ojos llenos de lágrimas, le prometió que siempre la llevaría en su corazón. Skuld partió con la esperanza de un futuro brillante y la determinación de convertirse en una hechicera que pudiera ayudar a los demás, sin importar las apariencias.

    Al adentrarse en el camino hacia su nueva vida, Skuld sintió una mezcla de emoción y nerviosismo, pero sobre todo, un profundo agradecimiento por la familia que siempre la había amado y protegido. Sabía que su viaje no sería fácil, pero con el recuerdo de su hogar en su corazón, estaba lista para enfrentar cualquier desafío que el destino le presentara.

    #monorol
    𝐈𝐧𝐟𝐚𝐧𝐜𝐢𝐚 En un pequeño pueblo rodeado de bosques y colinas, vivía una familia que destacaba no solo por su bondad, sino también por su aspecto peculiar. Skuld, la hija menor, había heredado características de sus ancestros tiefling, ojos brillantes y cuernos curvados, excepto su piel, la cual mantenía esa tonalidad rosácea típica de los humanos. A diferencia de sus padres, Ada y Tormund, y su hermano mayor, Eirik, que tenían apariencias humanas comunes, Skuld era un recordatorio constante de una herencia ancestral que muchos en el pueblo preferían olvidar. Desde su nacimiento, Ada y Tormund protegieron a Skuld con todo su amor y cuidado. Sabían que el mundo fuera de su hogar podía ser cruel, pero estaban decididos a enseñarle a su hija que su singularidad era una fortaleza, no una debilidad. Eirik, siempre el hermano protector, jugaba con Skuld y la defendía de las miradas y susurros de los aldeanos. Sin embargo, la malicia y el miedo de los habitantes del pueblo no tardaron en manifestarse. Los niños evitaban jugar con Skuld y algunos adultos incluso advertían a sus propios hijos que se mantuvieran alejados de la "niña demonio". Los rumores se esparcieron como el fuego, sugiriendo que la familia de Skuld estaba maldita, y que su presencia traería desdicha a la comunidad. Cada día, Skuld enfrentaba miradas de desprecio y palabras hirientes. Su corazón joven se llenaba de tristeza, y a menudo se refugiaba en el bosque cercano, donde encontraba consuelo en la naturaleza y en los animales que no la juzgaban por su apariencia. En esos momentos, Ada la encontraba y la abrazaba, recordándole que era amada y que su familia siempre estaría a su lado. Una noche, los aldeanos, incitados por el miedo y la superstición, decidieron confrontar a la familia. Con antorchas y armas improvisadas, se reunieron frente a la casa de Skuld, exigiendo que se marcharan. Tormund, con Eirik a su lado, salió a enfrentarlos, intentando calmar la multitud con palabras de paz y razón. Pero el odio era demasiado profundo. Fue en ese momento que Skuld, tomando valor de la fuerza y amor que su familia le había dado, salió de la casa y se paró junto a su padre y hermano. Con voz firme, les habló a los aldeanos, no con odio, sino con una sabiduría y compasión que desarmó su ira. Les recordó que todos eran diferentes a su manera y que el miedo solo los dividía. Aunque no todos los corazones fueron cambiados esa noche, algunos empezaron a ver más allá de su apariencia. Con el tiempo, la familia de Skuld demostró ser una parte invaluable de la comunidad, y lentamente, las heridas comenzaron a sanar. A medida que Skuld crecía, su interés por la magia y el deseo de aprender más sobre sus habilidades se hicieron más fuertes. Sus padres, reconociendo su talento innato y queriendo lo mejor para ella, contactaron con una prestigiosa escuela de hechicería en una ciudad lejana. Con el apoyo incondicional de su familia, Skuld se despidió de su hogar y de aquellos pocos que habían llegado a aceptarla. La despedida fue agridulce, llena de lágrimas y abrazos. Ada y Tormund le recordaron que siempre estarían orgullosos de ella, mientras Eirik, con una sonrisa y ojos llenos de lágrimas, le prometió que siempre la llevaría en su corazón. Skuld partió con la esperanza de un futuro brillante y la determinación de convertirse en una hechicera que pudiera ayudar a los demás, sin importar las apariencias. Al adentrarse en el camino hacia su nueva vida, Skuld sintió una mezcla de emoción y nerviosismo, pero sobre todo, un profundo agradecimiento por la familia que siempre la había amado y protegido. Sabía que su viaje no sería fácil, pero con el recuerdo de su hogar en su corazón, estaba lista para enfrentar cualquier desafío que el destino le presentara. #monorol
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    #𝑼𝒔𝒆𝒓 Han eliminado la cuenta de Cosette ahora que ella iba a escribir un monorrol de despedida todo sad JAJAJAJAJAJAJA
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  • -caminabas por la calles vacías de la ciudad, las luces de las farolas eran la única iluminación que tenías, un pequeño golpe llamo tu atención, al mirar te encontraste con una pequeña polilla que se golpeó contra el foco de la farola, sin saber el que algo atrajo tu atención de aquella polilla así que cuando esta salió volando tu cuerpo reaccionó por si mismo y empezó a moverse tras de ella, después de lo que se sintieron horas tu cuerpo paro al mismo tiempo que la polilla la cual voló hasta el velo de una persona, parecía estar frente a un gran templo, no sabías que era pero te puso nervioso pues pudiste escuchar un poco de una conversación entre la persona del velo y una persona con una lámpara de aceite-
    PVelo: por la vida de espirila
    PLampara: por la vida de espirila, me sorprende que ella haya decidido usar el viejo templo del inicio para su renacimiento
    PVelo: lo mismo digo, es peligroso incluso para nosotras
    PLampara: me preguntó que planea hacer
    -ambas personas agacharon la cabeza a forma de despedida y pudiste ver cómo la persona con el velo caminaba en tu dirección-
    -caminabas por la calles vacías de la ciudad, las luces de las farolas eran la única iluminación que tenías, un pequeño golpe llamo tu atención, al mirar te encontraste con una pequeña polilla que se golpeó contra el foco de la farola, sin saber el que algo atrajo tu atención de aquella polilla así que cuando esta salió volando tu cuerpo reaccionó por si mismo y empezó a moverse tras de ella, después de lo que se sintieron horas tu cuerpo paro al mismo tiempo que la polilla la cual voló hasta el velo de una persona, parecía estar frente a un gran templo, no sabías que era pero te puso nervioso pues pudiste escuchar un poco de una conversación entre la persona del velo y una persona con una lámpara de aceite- PVelo: por la vida de espirila PLampara: por la vida de espirila, me sorprende que ella haya decidido usar el viejo templo del inicio para su renacimiento PVelo: lo mismo digo, es peligroso incluso para nosotras PLampara: me preguntó que planea hacer -ambas personas agacharon la cabeza a forma de despedida y pudiste ver cómo la persona con el velo caminaba en tu dirección-
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