• Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Paimon es medio castrocita pero viendo lo que a hecho por los viajeros... (depende cuales uses)
    Es una gran compañera de viaje... Pero... Eso no le quita lo castrocita xD
    https://vt.tiktok.com/ZSUGD1QpF/
    Paimon es medio castrocita pero viendo lo que a hecho por los viajeros... (depende cuales uses) Es una gran compañera de viaje... Pero... Eso no le quita lo castrocita xD https://vt.tiktok.com/ZSUGD1QpF/
    0 comentarios 0 compartidos
  • (monorol corto)

    jacky hace tiempo hizo un trato con un demonio llamado "yuanchou" ese demonio chino que se decía que cumplía deseos a cambio de tener que servirle por el resto de tu vida. jacky ni si quiera lo pudo pensar mucho, su único deseo movido por una agonía física insoportable fue...

    "-quiero que deje de doler"

    el demonio sonrió y cumplió el deseo del adolescente.
    su cuerpo dejo de doler pero sus heridas seguían ahí, se terminaron volviendo sus eternas compañeras y a medida que las peticiones de yuanchou se hacían mas crueles, el chico empezó a sucumbir en la locura convirtiéndose en el monstruo que es hoy en dia.
    (monorol corto) jacky hace tiempo hizo un trato con un demonio llamado "yuanchou" ese demonio chino que se decía que cumplía deseos a cambio de tener que servirle por el resto de tu vida. jacky ni si quiera lo pudo pensar mucho, su único deseo movido por una agonía física insoportable fue... "-quiero que deje de doler" el demonio sonrió y cumplió el deseo del adolescente. su cuerpo dejo de doler pero sus heridas seguían ahí, se terminaron volviendo sus eternas compañeras y a medida que las peticiones de yuanchou se hacían mas crueles, el chico empezó a sucumbir en la locura convirtiéndose en el monstruo que es hoy en dia.
    Me gusta
    3
    0 turnos 0 maullidos
  • Creo que necesitare una compañera de avioncito de papel ..... ¿nezuko quera? O ¿buscare una? .....
    Creo que necesitare una compañera de avioncito de papel ..... ¿nezuko quera? O ¿buscare una? .....
    0 turnos 0 maullidos
  • Ya que no tengo a Nezuko, como compañera de aviosito de papel y tanjiro no sé dónde esta ¡Que aburrido!
    Ya que no tengo a Nezuko, como compañera de aviosito de papel y tanjiro no sé dónde esta ¡Que aburrido!
    0 turnos 0 maullidos
  • Aikaterine Ouro ℭ𝔢𝔯𝔢𝔰 𝔉𝔞𝔲𝔫𝔞 ᴳᵘᵃʳᵈⁱᵃⁿᵃ ᵈᵉ ˡᵃ ᴺᵃᵗᵘʳᵃˡᵉᶻᵃ

    *La cálida brisa roza su piel mientras Sana, con una gran sonrisa, se acerca a sus dos compañeras y las rodea con sus brazos extendidos, rebosante de energía solar.*

    —¡Hehehe~! ¡Cuánto tiempo sin verlas tan juntas! ¡La naturaleza, el tiempo y el espacio, reunidas otra vez!

    *Aprieta el abrazo con cariño, aunque con tanta fuerza que una de ellas se queja entre risas.*

    —Ah… perdón, olvidé que mi entusiasmo puede ser un poco… gravitacional, jejeje. Pero en serio, las extrañé mucho. El universo se siente mucho más brillante cuando estamos así.

    *Inclina la cabeza, su sonrisa se vuelve más suave.*

    —Prometamos que, sin importar cuántos mundos o eras pasen, seguiremos encontrándonos… una y otra vez.
    [Mercenary1x] [Ceres3] *La cálida brisa roza su piel mientras Sana, con una gran sonrisa, se acerca a sus dos compañeras y las rodea con sus brazos extendidos, rebosante de energía solar.* —¡Hehehe~! ¡Cuánto tiempo sin verlas tan juntas! ¡La naturaleza, el tiempo y el espacio, reunidas otra vez! *Aprieta el abrazo con cariño, aunque con tanta fuerza que una de ellas se queja entre risas.* —Ah… perdón, olvidé que mi entusiasmo puede ser un poco… gravitacional, jejeje. Pero en serio, las extrañé mucho. El universo se siente mucho más brillante cuando estamos así. *Inclina la cabeza, su sonrisa se vuelve más suave.* —Prometamos que, sin importar cuántos mundos o eras pasen, seguiremos encontrándonos… una y otra vez.
    Me gusta
    Me encocora
    2
    1 turno 0 maullidos
  • Aikaterine Ouro

    *Las manos de Sana brillaban suavemente, reflejando la luz del cielo mientras sonreía con esa energía cálida y desbordante que la caracterizaba.*

    -¡Mira, Aikaterine! ¿Ves? ¡Brilla! Jeje~ Cada vez que estoy contigo, todo parece tener más color, incluso las estrellas deben estar celosas ahora mismo.

    *Levanta sus manos como si atrapara la luz entre los dedos, riendo alegremente antes de mirar a su compañera con ternura.*

    -Sabes... me alegra mucho verte sonreír otra vez. Es como si el universo respirara tranquilo cuando lo haces.

    *Da un pequeño paso hacia ella, inclinando la cabeza con una expresión juguetona.*

    -Así que, ¿qué dices? ¿Hacemos que este momento dure un poco más?...
    [Mercenary1x] *Las manos de Sana brillaban suavemente, reflejando la luz del cielo mientras sonreía con esa energía cálida y desbordante que la caracterizaba.* -¡Mira, Aikaterine! ¿Ves? ¡Brilla! Jeje~ Cada vez que estoy contigo, todo parece tener más color, incluso las estrellas deben estar celosas ahora mismo. *Levanta sus manos como si atrapara la luz entre los dedos, riendo alegremente antes de mirar a su compañera con ternura.* -Sabes... me alegra mucho verte sonreír otra vez. Es como si el universo respirara tranquilo cuando lo haces. *Da un pequeño paso hacia ella, inclinando la cabeza con una expresión juguetona.* -Así que, ¿qué dices? ¿Hacemos que este momento dure un poco más?...
    Me gusta
    Me encocora
    4
    1 turno 0 maullidos
  • Se encontraba en uno de los viejos parques de Japon, Shinjuku, donde los viejos juegos para niños yacen oxidados, el lugar no tenia reformas y pero apenas mantenía sus colores.

    Llevo consigo una hielera de tamaño promedio, al abrirlo solo dejo ver que lo había llenado con un poco de agua y cascotes de hielo, pero lo principal eran ojos humanos, arrancados limpiamente sin la raíz y los nervios que estaban flotando y otros que estaban hundidos; aquello era un regalo para una vieja compañera, su querida depredadora.

    ─ Hmm.

    Invadido por un sentimiento nostálgico, esperanza algo que imperiosamente necesitaba volver a sentir, aquel acto decía todo lo contrario, se veía nefasto, solo el yakuza entendía porque hacia esto. Quizá de este modo tendría una chance de verla.

    Cerro la tapa y giro a los lados antes de sentarse en la rampa del tobogán con la esperanza de ver una pista o escuchar algún sonido que delatara su presencia, pero nada.

    ─ Que lastima, pensé que le gustarían, estos son de buenos cabrones de mierda que me cargue ayer.
    Se encontraba en uno de los viejos parques de Japon, Shinjuku, donde los viejos juegos para niños yacen oxidados, el lugar no tenia reformas y pero apenas mantenía sus colores. Llevo consigo una hielera de tamaño promedio, al abrirlo solo dejo ver que lo había llenado con un poco de agua y cascotes de hielo, pero lo principal eran ojos humanos, arrancados limpiamente sin la raíz y los nervios que estaban flotando y otros que estaban hundidos; aquello era un regalo para una vieja compañera, su querida depredadora. ㊗️ ─ Hmm. Invadido por un sentimiento nostálgico, esperanza algo que imperiosamente necesitaba volver a sentir, aquel acto decía todo lo contrario, se veía nefasto, solo el yakuza entendía porque hacia esto. Quizá de este modo tendría una chance de verla. Cerro la tapa y giro a los lados antes de sentarse en la rampa del tobogán con la esperanza de ver una pista o escuchar algún sonido que delatara su presencia, pero nada. ㊗️ ─ Que lastima, pensé que le gustarían, estos son de buenos cabrones de mierda que me cargue ayer.
    Me gusta
    Me encocora
    Me shockea
    4
    2 turnos 0 maullidos
  • Te quiero mucho, Abby.

    *Abraza con mucho cariño, su pequeña compañera de viaje *
    Te quiero mucho, Abby. *Abraza con mucho cariño, su pequeña compañera de viaje *
    Me encocora
    Me gusta
    4
    0 turnos 0 maullidos
  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
    Tenlo en cuenta al responder.
    Apartment, apartment.Apartment, apartment.Uh, uh-huh, uh-huh.

    —La serafín le ha cogido el gustillo de molestar a su compañera sandrone—
    Apartment, apartment.Apartment, apartment.Uh, uh-huh, uh-huh. 🎶 —La serafín le ha cogido el gustillo de molestar a su compañera sandrone—
    Me gusta
    Me encocora
    2
    3 comentarios 0 compartidos
  • 𝐓𝐡𝐞 𝐛𝐞𝐠𝐢𝐧𝐧𝐢𝐧𝐠
    Fandom Teen Wolf
    Categoría Suspenso
    Beacon Hills Memorial Hospital — 2:43 a.m.

    El hospital estaba en calma, de esa clase de silencio que no tranquiliza sino que espera.
    Los pasillos olían a desinfectante y a miedo contenido, la luz del fluorescente titilaba justo afuera de la habitación 207.

    Dentro, la chica del instituto —una estudiante cualquiera de Beacon Hills High, pierna enyesada, los dedos manchados de tinta— soñaba con salir de allí.

    La puerta se abrió sin ruido.
    Una figura entró, recortada por la luz blanca del pasillo. Hyacith sonreía con la dulzura perfecta: ojos miel, rostro familiar, ese tipo de calidez que siempre engaña.

    —No podías dormir —dijo suavemente, acercándose—. ¿Verdad?

    La muchacha la miró, confundida, aunque en su mente algo susurró que conocía esa voz.
    Hyacith se sentó al borde de la cama. La conversación se volvió un suspiro; el aire cambió de peso.

    —Sometimes the body needs to rest and the mind just needs to forget.

    El monitor cardíaco titiló una última vez antes de quedarse en silencio. Afuera, el viento empujó las cortinas. Y cuando el primer enfermero pasó a revisar, solo encontró la cama vacía y, sobre la almohada, una flor marchita con pétalos grises.




    Beacon Hills High — 7:50 a.m.

    El murmullo recorrió los pasillos antes de que la campana sonara.
    La policía había estado toda la noche en el hospital, preguntando por la estudiante desaparecida.
    Y sin embargo, ahí estaba ella.
    Caminando con muletas, con la misma férula en la pierna y una sonrisa nueva en los labios.

    —¿Qué demonios? —murmuró una compañera al verla entrar.

    Hyacith —ahora ella— giró la cabeza con ese gesto tímido que cualquiera habría reconocido como suyo.
    Su mirada se detuvo en los ojos asombrados de los demás. Durante un segundo, nadie habló.

    El sonido de los lockers, los pasos, las voces… todo pareció quedar suspendido.
    Solo Hyacith sonreía.

    —I told you I’d be fine, didn’t I? —dijo, con un guiño encantador.

    Y continuó su camino por el pasillo, cada paso medido, cada respiración idéntica a la de la chica que todos conocían.
    Solo que ahora, los reflejos en las ventanas mostraban otra cosa:
    ojos negros que parpadeaban un instante antes que los suyos, una sombra que sonreía medio segundo después.

    Por la tarde, la noticia del “milagro” se esparció.
    Nadie podía explicar cómo había regresado antes de que la policía cerrara el caso.
    Solo una enfermera insistía en algo imposible: que cuando revisó la habitación, la cama aún estaba caliente,
    pero el espejo frente a ella…
    todavía tenía huellas de manos, como si alguien hubiera intentado salir desde adentro.
    Beacon Hills Memorial Hospital — 2:43 a.m. El hospital estaba en calma, de esa clase de silencio que no tranquiliza sino que espera. Los pasillos olían a desinfectante y a miedo contenido, la luz del fluorescente titilaba justo afuera de la habitación 207. Dentro, la chica del instituto —una estudiante cualquiera de Beacon Hills High, pierna enyesada, los dedos manchados de tinta— soñaba con salir de allí. La puerta se abrió sin ruido. Una figura entró, recortada por la luz blanca del pasillo. Hyacith sonreía con la dulzura perfecta: ojos miel, rostro familiar, ese tipo de calidez que siempre engaña. —No podías dormir —dijo suavemente, acercándose—. ¿Verdad? La muchacha la miró, confundida, aunque en su mente algo susurró que conocía esa voz. Hyacith se sentó al borde de la cama. La conversación se volvió un suspiro; el aire cambió de peso. —Sometimes the body needs to rest and the mind just needs to forget. El monitor cardíaco titiló una última vez antes de quedarse en silencio. Afuera, el viento empujó las cortinas. Y cuando el primer enfermero pasó a revisar, solo encontró la cama vacía y, sobre la almohada, una flor marchita con pétalos grises. Beacon Hills High — 7:50 a.m. El murmullo recorrió los pasillos antes de que la campana sonara. La policía había estado toda la noche en el hospital, preguntando por la estudiante desaparecida. Y sin embargo, ahí estaba ella. Caminando con muletas, con la misma férula en la pierna y una sonrisa nueva en los labios. —¿Qué demonios? —murmuró una compañera al verla entrar. Hyacith —ahora ella— giró la cabeza con ese gesto tímido que cualquiera habría reconocido como suyo. Su mirada se detuvo en los ojos asombrados de los demás. Durante un segundo, nadie habló. El sonido de los lockers, los pasos, las voces… todo pareció quedar suspendido. Solo Hyacith sonreía. —I told you I’d be fine, didn’t I? —dijo, con un guiño encantador. Y continuó su camino por el pasillo, cada paso medido, cada respiración idéntica a la de la chica que todos conocían. Solo que ahora, los reflejos en las ventanas mostraban otra cosa: ojos negros que parpadeaban un instante antes que los suyos, una sombra que sonreía medio segundo después. Por la tarde, la noticia del “milagro” se esparció. Nadie podía explicar cómo había regresado antes de que la policía cerrara el caso. Solo una enfermera insistía en algo imposible: que cuando revisó la habitación, la cama aún estaba caliente, pero el espejo frente a ella… todavía tenía huellas de manos, como si alguien hubiera intentado salir desde adentro.
    Tipo
    Grupal
    Líneas
    22
    Estado
    Disponible
    Me encocora
    2
    2 turnos 0 maullidos
Ver más resultados
Patrocinados