Hay gente que muere por ser vista…
pero no mueve un maldito dedo para lograrlo.
Se plantan ahí, con la cara bonita y la autoestima inflada,
esperando que el mundo les aplauda solo por existir.
Spoiler: no funciona así.
Se creen especiales porque alguien, alguna vez, les dijo que lo eran.
Pero no tienen ideas, no tienen chispa,
y cuando intentan acercarse a alguien,
repiten el mismo guion barato que ya fracasó en otro lado.
No es encanto, es copia.
No es presencia, es ruido vacío.
Dicen querer conexiones reales,
pero no saben ni sostener una mirada sin fingir.
Quieren ser inolvidables,
pero no dejan nada que valga la pena recordar.
Son como canciones sin letra:
bonitas al principio, pero te olvidás de ellas en cinco minutos.
Y claro, luego lloran porque nadie las ve.
Pero… ¿qué quieren que vea uno? ¿La pose? ¿El filtro?
No son invisibles por injusticia.
Lo son porque no tienen nada que decir.
Porque no queman, no muerden, no vibran.
Y el mundo no gira para quien no late.
pero no mueve un maldito dedo para lograrlo.
Se plantan ahí, con la cara bonita y la autoestima inflada,
esperando que el mundo les aplauda solo por existir.
Spoiler: no funciona así.
Se creen especiales porque alguien, alguna vez, les dijo que lo eran.
Pero no tienen ideas, no tienen chispa,
y cuando intentan acercarse a alguien,
repiten el mismo guion barato que ya fracasó en otro lado.
No es encanto, es copia.
No es presencia, es ruido vacío.
Dicen querer conexiones reales,
pero no saben ni sostener una mirada sin fingir.
Quieren ser inolvidables,
pero no dejan nada que valga la pena recordar.
Son como canciones sin letra:
bonitas al principio, pero te olvidás de ellas en cinco minutos.
Y claro, luego lloran porque nadie las ve.
Pero… ¿qué quieren que vea uno? ¿La pose? ¿El filtro?
No son invisibles por injusticia.
Lo son porque no tienen nada que decir.
Porque no queman, no muerden, no vibran.
Y el mundo no gira para quien no late.
Hay gente que muere por ser vista…
pero no mueve un maldito dedo para lograrlo.
Se plantan ahí, con la cara bonita y la autoestima inflada,
esperando que el mundo les aplauda solo por existir.
Spoiler: no funciona así.
Se creen especiales porque alguien, alguna vez, les dijo que lo eran.
Pero no tienen ideas, no tienen chispa,
y cuando intentan acercarse a alguien,
repiten el mismo guion barato que ya fracasó en otro lado.
No es encanto, es copia.
No es presencia, es ruido vacío.
Dicen querer conexiones reales,
pero no saben ni sostener una mirada sin fingir.
Quieren ser inolvidables,
pero no dejan nada que valga la pena recordar.
Son como canciones sin letra:
bonitas al principio, pero te olvidás de ellas en cinco minutos.
Y claro, luego lloran porque nadie las ve.
Pero… ¿qué quieren que vea uno? ¿La pose? ¿El filtro?
No son invisibles por injusticia.
Lo son porque no tienen nada que decir.
Porque no queman, no muerden, no vibran.
Y el mundo no gira para quien no late.

