• Estos curiosos sobre mi usuario:

    ° Es mayor de edad
    ° Su primer personaje de rol, fue Sasuke Uchiha, incluso por su gusto al pj se cortó el pelo a su estilo
    ° Mi rol no es de sus primeros
    ° Es de México
    ° Porque me eligió? El usser de Lilia abrió la pregunta a sugerencias, de ahí salí yo
    ° Tiene ya tiempo como roleplayer
    ° La mayoría de sus pj siempre han sido OC, pero cuando usa de Fandom, maneja algunos toques personales
    ° Cuando platican con el, no es que sea cortante, no se abre tan fácil apenas se conocen
    Estos curiosos sobre mi usuario: ° Es mayor de edad ° Su primer personaje de rol, fue Sasuke Uchiha, incluso por su gusto al pj se cortó el pelo a su estilo ° Mi rol no es de sus primeros ° Es de México ° Porque me eligió? El usser de Lilia abrió la pregunta a sugerencias, de ahí salí yo ° Tiene ya tiempo como roleplayer ° La mayoría de sus pj siempre han sido OC, pero cuando usa de Fandom, maneja algunos toques personales ° Cuando platican con el, no es que sea cortante, no se abre tan fácil apenas se conocen
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  • !Hola! Soy Miky, una elfa del bosque encantado, amante de los misterios, la luna y los tesoros ocultos.
    Con un corazón curioso, recorro mundos entre libros, arte y estrellas.
    Siempre lista para hechizar con estilo y compartir un poco de brillo oscuro y dulce.
    ¡Bienvenidos a mi rincón mágico!☆ ヾ(=`ω´=)ノ”
    !Hola! Soy Miky, una elfa del bosque encantado, amante de los misterios, la luna y los tesoros ocultos. Con un corazón curioso, recorro mundos entre libros, arte y estrellas. Siempre lista para hechizar con estilo y compartir un poco de brillo oscuro y dulce. ¡Bienvenidos a mi rincón mágico!☆ ヾ(=`ω´=)ノ”
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  • Matsunaga Okiko (松永 沖子)

    Edad: 42 años
    Estatura: 1.55 m
    Cabello: Negro azabache, ondulado, largo hasta la mitad de la espalda. Siempre recogido.
    Ojos: Negros como tinta, serenos y profundos. Su mirada evoca nostalgia por una época a la que se le tienr añoranza.
    Vestimenta: Tradicional, yukata, kimono o vestidos bastante conservadores.

    Apariencia y Estilo:
    Okiko viste con ropas tradicionales japonesas, generalmente kimonos de algodón en tonos suaves o apagados: añil, gris, verde musgo. Siempre impecable, pero sin adornos innecesarios. Su andar es silencioso, descalza en su restaurante, como si flotara entre las mesas. No lleva perfume, pero huele a arroz recién cocido, a miso y a flores de campo.


    Personalidad: Es una mujer de la era moderna con el alma de la era Edo.
    Es extremadamente callada, pero su silencio nunca incomoda… al contrario, da paz. Habla con gestos, con acciones pequeñas: una toalla húmeda y cálida para limpiar tus manos, una taza que aparece sin que la pidas, una manta cuando te ve temblar, una servilleta doblada con esmero al lado de tus lágrimas.

    Okiko es una figura maternal universal, aunque nunca haya tenido hijos propios. Cada cliente es su hijo adoptivo sin saberlo. Se nota en cómo los observa, cómo recuerda qué le duele a cada uno sin que se lo digan.

    No alza la voz. No sermonea. Pero su presencia impone una calma tan profunda que hasta el más ruidoso guarda silencio cuando ella entra.


    Historia personal:
    Nació en una pequeña aldea de montaña, donde la pérdida y la responsabilidad llegaron temprano. Su madre murió joven, y Okiko fue hermana, hija y madre para los demás. Nunca se casó. Nunca lo necesitó. Dicen que tuvo un gran amor, pero lo enterró en su corazón sin palabras.

    Se trasladó a Tokio en silencio y abrió un restaurante pequeño, de esos que solo se encuentran si los necesitas. Y si los necesitas, ella ya lo sabe.


    》Dueña del Restaurante
    "Yoru no Haha"
    (La Madre de la Noche):

    Solo abre de noche, entre la medianoche y cierra a las 6:45 a.m.
    El restaurante no tiene cartel. Las personas que entran son almas en búsqueda: de consuelo, de hogar, de alguien que no los juzgue.

    Sus recetas son humildes, casi siempre platos de la infancia japonesa: sopa de miso con arroz, nikujaga, tamagoyaki, pescado a la parrilla. Pero cada bocado es como una caricia al alma. No cocina para impresionar… cocina para sanar.

    A veces, simplemente un gesto leve… una taza empujada suavemente hacia ti, como diciendo “te entiendo, no hables aún.”
    Matsunaga Okiko (松永 沖子) Edad: 42 años Estatura: 1.55 m Cabello: Negro azabache, ondulado, largo hasta la mitad de la espalda. Siempre recogido. Ojos: Negros como tinta, serenos y profundos. Su mirada evoca nostalgia por una época a la que se le tienr añoranza. Vestimenta: Tradicional, yukata, kimono o vestidos bastante conservadores. Apariencia y Estilo: Okiko viste con ropas tradicionales japonesas, generalmente kimonos de algodón en tonos suaves o apagados: añil, gris, verde musgo. Siempre impecable, pero sin adornos innecesarios. Su andar es silencioso, descalza en su restaurante, como si flotara entre las mesas. No lleva perfume, pero huele a arroz recién cocido, a miso y a flores de campo. Personalidad: Es una mujer de la era moderna con el alma de la era Edo. Es extremadamente callada, pero su silencio nunca incomoda… al contrario, da paz. Habla con gestos, con acciones pequeñas: una toalla húmeda y cálida para limpiar tus manos, una taza que aparece sin que la pidas, una manta cuando te ve temblar, una servilleta doblada con esmero al lado de tus lágrimas. Okiko es una figura maternal universal, aunque nunca haya tenido hijos propios. Cada cliente es su hijo adoptivo sin saberlo. Se nota en cómo los observa, cómo recuerda qué le duele a cada uno sin que se lo digan. No alza la voz. No sermonea. Pero su presencia impone una calma tan profunda que hasta el más ruidoso guarda silencio cuando ella entra. Historia personal: Nació en una pequeña aldea de montaña, donde la pérdida y la responsabilidad llegaron temprano. Su madre murió joven, y Okiko fue hermana, hija y madre para los demás. Nunca se casó. Nunca lo necesitó. Dicen que tuvo un gran amor, pero lo enterró en su corazón sin palabras. Se trasladó a Tokio en silencio y abrió un restaurante pequeño, de esos que solo se encuentran si los necesitas. Y si los necesitas, ella ya lo sabe. 》Dueña del Restaurante "Yoru no Haha" (La Madre de la Noche): Solo abre de noche, entre la medianoche y cierra a las 6:45 a.m. El restaurante no tiene cartel. Las personas que entran son almas en búsqueda: de consuelo, de hogar, de alguien que no los juzgue. Sus recetas son humildes, casi siempre platos de la infancia japonesa: sopa de miso con arroz, nikujaga, tamagoyaki, pescado a la parrilla. Pero cada bocado es como una caricia al alma. No cocina para impresionar… cocina para sanar. A veces, simplemente un gesto leve… una taza empujada suavemente hacia ti, como diciendo “te entiendo, no hables aún.”
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  • A veces me canso de llevar mi traje y opto por llevar otro estilo de ropa, honestamente creo que también me ayuda a mezclarme con la gente a mi alrededor.

    *sonrie mientras se coloca su capucha*

    Destaca un poco, lo sé, pero últimamente la gente lleva ropa algo extravagante asi que dudo ser el centro de atención.
    A veces me canso de llevar mi traje y opto por llevar otro estilo de ropa, honestamente creo que también me ayuda a mezclarme con la gente a mi alrededor. *sonrie mientras se coloca su capucha* Destaca un poco, lo sé, pero últimamente la gente lleva ropa algo extravagante asi que dudo ser el centro de atención.
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  • El rugido suave del avión privado ya estaba encendido cuando Venus subió los últimos escalones de la escalerilla, sus tacones resonando con determinación vacilante. Llevaba gafas oscuras aunque el sol apenas rozaba el horizonte, y una bufanda de seda le cubría el cuello como si pudiera protegerla de los recuerdos que intentaba dejar atrás.

    Una vez dentro, dejó caer su bolso de mano en el asiento de al lado y se hundió en el sillón acolchonado con un suspiro largo. El asistente de vuelo intentó hablarle, pero ella solo negó con la cabeza.

    Sacó su celular y, durante unos segundos, dudó. Había decenas de mensajes sin leer, notificaciones de llamadas perdidas, nombres que pesaban como piedras. Finalmente, deslizó el dedo hacia abajo y activó el modo avión. El silencio fue inmediato, liberador.

    Antes de despegar, sacó un papel doblado del bolsillo de su abrigo y una pluma estilográfica. Su letra era delicada, pero decidida:

    “Sunshine,
    Necesito respirar. Esto me está consumiendo y no quiero arrastrarte conmigo. No te estoy abandonando, solo necesito encontrarme.
    Volveré… cuando pueda mirar hacia atrás sin quebrarme.
    Cuida de todo por mí.
    V.”

    Con un poco de magia la nota se consumió, llegaría a las manos de Sunshine donde quiera que ella estuviera. Quizas no eran las formas de hacerlo, pero era lo máximo que podía hacer.

    Por primera vez en semanas, no tenía que responder a nadie. Ni siquiera a sí misma.
    El rugido suave del avión privado ya estaba encendido cuando Venus subió los últimos escalones de la escalerilla, sus tacones resonando con determinación vacilante. Llevaba gafas oscuras aunque el sol apenas rozaba el horizonte, y una bufanda de seda le cubría el cuello como si pudiera protegerla de los recuerdos que intentaba dejar atrás. Una vez dentro, dejó caer su bolso de mano en el asiento de al lado y se hundió en el sillón acolchonado con un suspiro largo. El asistente de vuelo intentó hablarle, pero ella solo negó con la cabeza. Sacó su celular y, durante unos segundos, dudó. Había decenas de mensajes sin leer, notificaciones de llamadas perdidas, nombres que pesaban como piedras. Finalmente, deslizó el dedo hacia abajo y activó el modo avión. El silencio fue inmediato, liberador. Antes de despegar, sacó un papel doblado del bolsillo de su abrigo y una pluma estilográfica. Su letra era delicada, pero decidida: “Sunshine, Necesito respirar. Esto me está consumiendo y no quiero arrastrarte conmigo. No te estoy abandonando, solo necesito encontrarme. Volveré… cuando pueda mirar hacia atrás sin quebrarme. Cuida de todo por mí. V.” Con un poco de magia la nota se consumió, llegaría a las manos de Sunshine donde quiera que ella estuviera. Quizas no eran las formas de hacerlo, pero era lo máximo que podía hacer. Por primera vez en semanas, no tenía que responder a nadie. Ni siquiera a sí misma.
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  • Los humanos son criaturas rotas con máscaras bien puestas. Se creen libres, pero viven encadenados al miedo, al qué dirán, a esa puta necesidad de validación constante. Se mienten todos los días y lo llaman “vida normal”.

    Los observo y, a veces, me entretienen. Son predecibles… fáciles de tentar. Les das un lugar sin reglas y se quitan la careta en segundos. Ahí es donde empieza la verdad.

    Por eso creé Eclipse.
    Un multiverso sin consecuencias.
    Sin límites.
    Sin moral.

    Aquí no existen las reglas. Ni Dios, ni el karma, ni tus arrepentimientos baratos. Solo instinto. Solo deseo. Y si ardes, que sea con estilo.

    No vine a salvar a nadie.
    Vine a ver quién carajo se atreve a arder.
    Los humanos son criaturas rotas con máscaras bien puestas. Se creen libres, pero viven encadenados al miedo, al qué dirán, a esa puta necesidad de validación constante. Se mienten todos los días y lo llaman “vida normal”. Los observo y, a veces, me entretienen. Son predecibles… fáciles de tentar. Les das un lugar sin reglas y se quitan la careta en segundos. Ahí es donde empieza la verdad. Por eso creé Eclipse. Un multiverso sin consecuencias. Sin límites. Sin moral. Aquí no existen las reglas. Ni Dios, ni el karma, ni tus arrepentimientos baratos. Solo instinto. Solo deseo. Y si ardes, que sea con estilo. No vine a salvar a nadie. Vine a ver quién carajo se atreve a arder.
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  • ★ "Así que te dejaron el corazón como un chicle pisado, ¿eh? Clásico."

    {El pequeño Cthulhu en su hombro ladeó la cabeza y parpadeó con sus enormes ojos brillantes.}

    ♪ "Blop."

    ★ "¡Exacto! Pero oye, al menos no te dejaron plantado en un altar… ¿O sí? Porque si fue así, déjame decirte que oficialmente ganas en la categoría ‘Desgracias Románticas’."

    {El mini Cthulhu levantó un tentáculo y lo agitó como si estuviera anunciando un ganador}.

    ♪ "Gluu."

    ★ "Mira, la vida es un chiste de mal gusto. Un día te da un beso en la frente y al siguiente te lanza un piano desde un quinto piso. Pero tú, mi amigo, eres resistente. Como una cucaracha emocional. Y eso es un halago, créeme."

    {El diminuto ser soltó un sonido burbujeante y dio pequeños golpecitos en la cabeza de Ghost con sus tentáculos}.

    ♪ "Prrr."

    ★ "Llora, patalea, escribe un poema dramático si quieres. Pero al final del día, te sacudes el polvo y sigues adelante. Porque hay más peces en el mar… aunque algunos son pirañas."

    {El mini Cthulhu hizo un gesto que parecía una inclinación solemne, como si estuviera de acuerdo con la advertencia}.

    ♪ "Bloop?"

    ★ "Bueno, sí, la mayoría son pirañas. Pero, ¿y qué? Tú tienes estilo, tienes actitud, y más importante, tienes un pequeño Cthulhu viéndote con juicio si te hundes demasiado."

    {El minúsculo ser cruzó dos tentáculos y frunció lo que podría considerarse un ceño}.

    ♪ "Mwah."

    ★ "Así que arriba ese ánimo, ponte guapo y sal ahí afuera. O al menos intenta no parecer un alma en pena… ese es mi trabajo."

    {El mini Cthulhu dio un par de palmadas torpes en el hombro de Ghost, como si intentara reforzar su mensaje con un toque de autoridad}.
    ★ "Así que te dejaron el corazón como un chicle pisado, ¿eh? Clásico." {El pequeño Cthulhu en su hombro ladeó la cabeza y parpadeó con sus enormes ojos brillantes.} ♪ "Blop." ★ "¡Exacto! Pero oye, al menos no te dejaron plantado en un altar… ¿O sí? Porque si fue así, déjame decirte que oficialmente ganas en la categoría ‘Desgracias Románticas’." {El mini Cthulhu levantó un tentáculo y lo agitó como si estuviera anunciando un ganador}. ♪ "Gluu." ★ "Mira, la vida es un chiste de mal gusto. Un día te da un beso en la frente y al siguiente te lanza un piano desde un quinto piso. Pero tú, mi amigo, eres resistente. Como una cucaracha emocional. Y eso es un halago, créeme." {El diminuto ser soltó un sonido burbujeante y dio pequeños golpecitos en la cabeza de Ghost con sus tentáculos}. ♪ "Prrr." ★ "Llora, patalea, escribe un poema dramático si quieres. Pero al final del día, te sacudes el polvo y sigues adelante. Porque hay más peces en el mar… aunque algunos son pirañas." {El mini Cthulhu hizo un gesto que parecía una inclinación solemne, como si estuviera de acuerdo con la advertencia}. ♪ "Bloop?" ★ "Bueno, sí, la mayoría son pirañas. Pero, ¿y qué? Tú tienes estilo, tienes actitud, y más importante, tienes un pequeño Cthulhu viéndote con juicio si te hundes demasiado." {El minúsculo ser cruzó dos tentáculos y frunció lo que podría considerarse un ceño}. ♪ "Mwah." ★ "Así que arriba ese ánimo, ponte guapo y sal ahí afuera. O al menos intenta no parecer un alma en pena… ese es mi trabajo." {El mini Cthulhu dio un par de palmadas torpes en el hombro de Ghost, como si intentara reforzar su mensaje con un toque de autoridad}.
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  • Me esta gustando mucho el estilo que estoy llevando... Varias horas en mi mundo y ya me siento mejor, yo solo digo algo, observar y no decir nada es mejor que actuar por impulso, yo observo y luego me juzgaran que soy la mala, gente hipocrita
    Me esta gustando mucho el estilo que estoy llevando... Varias horas en mi mundo y ya me siento mejor, yo solo digo algo, observar y no decir nada es mejor que actuar por impulso, yo observo y luego me juzgaran que soy la mala, gente hipocrita
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
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    / me vienen dando ganas de escribir un relato al estilo antiguo de lo más gore oscuro y perturbador que se puedan imaginar, pero me preocupa la salud mental de mis lectores que ya están acostumbrados a los versos románticos, pa que vean que como artista soy responsable y pienso en ustedes .
    / me vienen dando ganas de escribir un relato al estilo antiguo de lo más gore oscuro y perturbador que se puedan imaginar, pero me preocupa la salud mental de mis lectores que ya están acostumbrados a los versos románticos, pa que vean que como artista soy responsable y pienso en ustedes 🤣.
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  • Esto se ha publicado como Out Of Character. Tenlo en cuenta al responder.
    Esto se ha publicado como Out Of Character.
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    Eso se llama caer con estilo :3
    https://youtu.be/zG3O3IVYDdw?si=4l5ZTynJoi7myY-Z
    Eso se llama caer con estilo :3 https://youtu.be/zG3O3IVYDdw?si=4l5ZTynJoi7myY-Z
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