—Quizás... Tal vez... No siento nada por ahora. (...) Tu, ¿quién eres? — Preguntó Kite con mucha curiosidad y admiración. El desplante del joven a su lado la dejaba sin palabras.
—Debemos asegurarnos de que tu pierna esté bien. Sigueme. —
Ignorando la pregunta de la mestiza, el joven condujo a la muchacha a una pequeña cabaña en el bosque. Ahi dentro, hizo un gesto con la cabeza para que se siente en una silla de madera muy vieja, mientras el comenzó a preparar un brebaje que tras unos minutos terminó.
—Ten, bebe. Con esto estaremos seguros de que ningún veneno te hará daño.—
—Debemos asegurarnos de que tu pierna esté bien. Sigueme. —
Ignorando la pregunta de la mestiza, el joven condujo a la muchacha a una pequeña cabaña en el bosque. Ahi dentro, hizo un gesto con la cabeza para que se siente en una silla de madera muy vieja, mientras el comenzó a preparar un brebaje que tras unos minutos terminó.
—Ten, bebe. Con esto estaremos seguros de que ningún veneno te hará daño.—
—Quizás... Tal vez... No siento nada por ahora. (...) Tu, ¿quién eres? — Preguntó Kite con mucha curiosidad y admiración. El desplante del joven a su lado la dejaba sin palabras.
—Debemos asegurarnos de que tu pierna esté bien. Sigueme. —
Ignorando la pregunta de la mestiza, el joven condujo a la muchacha a una pequeña cabaña en el bosque. Ahi dentro, hizo un gesto con la cabeza para que se siente en una silla de madera muy vieja, mientras el comenzó a preparar un brebaje que tras unos minutos terminó.
—Ten, bebe. Con esto estaremos seguros de que ningún veneno te hará daño.—