La perdida, no importa cuanto se busque escapar de ella. Siempre llegara como una fuerza inevitable a la que es mejor ceder. Un vacío en el pecho que no puede ser llenado con nada, te hunde poco a poco y cualquier movimiento solo te lleva más abajo. Naturalmente los humanos son seres adaptativos, del dolor viene el aprendizaje, pero para el joven de cabellos negros el dolor causado por la perdida no se borra.


¿Cuantas veces ha visto a sus seres queridos sufrir? ¿Cuantas veces no ha podido hacer nada más que mirar?, desde que era niño ha sido lo mismo. Rika, sus queridos amigos Panda, Maki e Inumaki contra Geto, Shibuya. La gente lo ha necesitado y su incapacidad de atender el llamado conllevo sufrimiento y muerte. Ahora su profesor peleó contra el Rey de las maldiciones, pese a tener un presentimiento negativo durante toda la batalla, trato de sugestionarse en que solo estaba siendo pesimista. Que aquel albino sobrepasaría a el rey de las maldiciones, después de todo "Satoru Gojo es el hechicero más fuerte" ¿No?, no obstante sus peores pesadillas se hicieron realidad. La calma se vio perturbada de una manera ominosa, y lo que no debía ocurrir ocurrió. Satoru perdió, pese a darlo todo, pese a poner su alma en el combate fue sobrepasado por Sukuna que maliciosamente lo asesino en un momento de descuido, cuando el jubilo embriago el ambiente. Ahora estaba ahí partido a la mitad el cuerpo del albino. Su mente no daba cabida a lo que presenciaba, si estaba en un sueño deseaba despertar. Su pecho apretaba, el aire en sus pulmones faltaba haciendo su respiración entre cortada. Su rostro estaba ensombrecido, no solo sentía tristeza si no que la impotencia e ira se entremezclaban en su ser ¿Por que tuvo que quedarse ahí viendo? ¿Por que no fue a ayudarlo cuando tuvo la oportunidad? ¿Por que?, su cabeza era un desastre. Apretaba el mango de su katana temblando ligeramente, nuevamente fue un inútil. Y dicha inutilidad condeno a todos.
La perdida, no importa cuanto se busque escapar de ella. Siempre llegara como una fuerza inevitable a la que es mejor ceder. Un vacío en el pecho que no puede ser llenado con nada, te hunde poco a poco y cualquier movimiento solo te lleva más abajo. Naturalmente los humanos son seres adaptativos, del dolor viene el aprendizaje, pero para el joven de cabellos negros el dolor causado por la perdida no se borra. ¿Cuantas veces ha visto a sus seres queridos sufrir? ¿Cuantas veces no ha podido hacer nada más que mirar?, desde que era niño ha sido lo mismo. Rika, sus queridos amigos Panda, Maki e Inumaki contra Geto, Shibuya. La gente lo ha necesitado y su incapacidad de atender el llamado conllevo sufrimiento y muerte. Ahora su profesor peleó contra el Rey de las maldiciones, pese a tener un presentimiento negativo durante toda la batalla, trato de sugestionarse en que solo estaba siendo pesimista. Que aquel albino sobrepasaría a el rey de las maldiciones, después de todo "Satoru Gojo es el hechicero más fuerte" ¿No?, no obstante sus peores pesadillas se hicieron realidad. La calma se vio perturbada de una manera ominosa, y lo que no debía ocurrir ocurrió. Satoru perdió, pese a darlo todo, pese a poner su alma en el combate fue sobrepasado por Sukuna que maliciosamente lo asesino en un momento de descuido, cuando el jubilo embriago el ambiente. Ahora estaba ahí partido a la mitad el cuerpo del albino. Su mente no daba cabida a lo que presenciaba, si estaba en un sueño deseaba despertar. Su pecho apretaba, el aire en sus pulmones faltaba haciendo su respiración entre cortada. Su rostro estaba ensombrecido, no solo sentía tristeza si no que la impotencia e ira se entremezclaban en su ser ¿Por que tuvo que quedarse ahí viendo? ¿Por que no fue a ayudarlo cuando tuvo la oportunidad? ¿Por que?, su cabeza era un desastre. Apretaba el mango de su katana temblando ligeramente, nuevamente fue un inútil. Y dicha inutilidad condeno a todos.
Me encocora
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