Escapó de sus labios una queja prolongada, se acercó a ella un poco más para poder rodearla por la cintura.

Él apoyó su mejilla sobre su hombro.

" Ya estoy acostumbrado, de todos modos, siempre me regañan. "

Aseguró, antes de dejarle un pequeño beso sobre el hombro.

" Soy algo necio, eso lo saben todos. Si lo piensas bien, ya deberían estar acostumbrados. "