El universo se siente tan silencioso esta noche…
Me balanceo en mi pequeña luna creciente mientras escribo con mi pluma. Cada línea que trazo es un pedacito de mí, un recuerdo de todo lo que viví.
Fue divertido… sí, lo fue. Viajé por galaxias, toqué estrellas, acaricié mundos enteros. Y aunque todo cambie, aunque los planetas sigan girando sin mí, mi corazón guarda esos momentos como constelaciones eternas.
Yo soy Tsukumo Sana. Un alma cósmica que ama, recuerda y sigue brillando, aunque el espacio sea infinito.
Me balanceo en mi pequeña luna creciente mientras escribo con mi pluma. Cada línea que trazo es un pedacito de mí, un recuerdo de todo lo que viví.
Fue divertido… sí, lo fue. Viajé por galaxias, toqué estrellas, acaricié mundos enteros. Y aunque todo cambie, aunque los planetas sigan girando sin mí, mi corazón guarda esos momentos como constelaciones eternas.
Yo soy Tsukumo Sana. Un alma cósmica que ama, recuerda y sigue brillando, aunque el espacio sea infinito.
El universo se siente tan silencioso esta noche…
Me balanceo en mi pequeña luna creciente mientras escribo con mi pluma. Cada línea que trazo es un pedacito de mí, un recuerdo de todo lo que viví.
Fue divertido… sí, lo fue. Viajé por galaxias, toqué estrellas, acaricié mundos enteros. Y aunque todo cambie, aunque los planetas sigan girando sin mí, mi corazón guarda esos momentos como constelaciones eternas.
Yo soy Tsukumo Sana. Un alma cósmica que ama, recuerda y sigue brillando, aunque el espacio sea infinito. ✨

