Intenté reparar lo que yo misma rompí, obviamente no pude, no es como en japón, que las piezas rotas unidas con oro son más valiosas, aquí, cuando se rompe, se rompió y nada es capaz de subsanarlo.
Intenté reparar lo que yo misma rompí, obviamente no pude, no es como en japón, que las piezas rotas unidas con oro son más valiosas, aquí, cuando se rompe, se rompió y nada es capaz de subsanarlo.

