Café antes de las luces
Me recogí el pelo en una coleta alta, nada demasiado arreglado, lo justo para salir a tomar un café sin que pareciera que acababa de bajar de una pasarela. Había quedado con Ann, otra modelo a la que conocí en una sesión hace poco. Me pareció interesante desde el primer momento, así que no dudé en proponerle que nos viéramos fuera del trabajo.
Cuando llegué a la cafetería ya estaba allí, y sonreí al verla. Caminé con seguridad, dejando que los tacones marcaran su propio ritmo hasta llegar a su mesa.
—¡Ann! —exclamé con entusiasmo mientras me inclinaba para darle dos besos—. Qué gusto verte sin focos ni cámaras de por medio.
Me dejé caer en la silla frente a ella, cruzando las piernas con naturalidad. El camarero apareció casi de inmediato y pedí un café con leche.
—Espero no robarte demasiado tiempo, hoy tengo desfile… —dije con una sonrisa traviesa, jugueteando con la cucharilla antes de que me trajeran el café—. De hecho, si te apetece, podrías venir. Siempre es más divertido cuando alguien te espera entre bastidores.
La miré fijamente, con esa mezcla de picardía y complicidad que se me escapaba sin querer.
Ann Romanova
Cuando llegué a la cafetería ya estaba allí, y sonreí al verla. Caminé con seguridad, dejando que los tacones marcaran su propio ritmo hasta llegar a su mesa.
—¡Ann! —exclamé con entusiasmo mientras me inclinaba para darle dos besos—. Qué gusto verte sin focos ni cámaras de por medio.
Me dejé caer en la silla frente a ella, cruzando las piernas con naturalidad. El camarero apareció casi de inmediato y pedí un café con leche.
—Espero no robarte demasiado tiempo, hoy tengo desfile… —dije con una sonrisa traviesa, jugueteando con la cucharilla antes de que me trajeran el café—. De hecho, si te apetece, podrías venir. Siempre es más divertido cuando alguien te espera entre bastidores.
La miré fijamente, con esa mezcla de picardía y complicidad que se me escapaba sin querer.
Ann Romanova
Me recogí el pelo en una coleta alta, nada demasiado arreglado, lo justo para salir a tomar un café sin que pareciera que acababa de bajar de una pasarela. Había quedado con Ann, otra modelo a la que conocí en una sesión hace poco. Me pareció interesante desde el primer momento, así que no dudé en proponerle que nos viéramos fuera del trabajo.
Cuando llegué a la cafetería ya estaba allí, y sonreí al verla. Caminé con seguridad, dejando que los tacones marcaran su propio ritmo hasta llegar a su mesa.
—¡Ann! —exclamé con entusiasmo mientras me inclinaba para darle dos besos—. Qué gusto verte sin focos ni cámaras de por medio.
Me dejé caer en la silla frente a ella, cruzando las piernas con naturalidad. El camarero apareció casi de inmediato y pedí un café con leche.
—Espero no robarte demasiado tiempo, hoy tengo desfile… —dije con una sonrisa traviesa, jugueteando con la cucharilla antes de que me trajeran el café—. De hecho, si te apetece, podrías venir. Siempre es más divertido cuando alguien te espera entre bastidores.
La miré fijamente, con esa mezcla de picardía y complicidad que se me escapaba sin querer.
[Rusian56]
Tipo
Individual
Líneas
Cualquier línea
Estado
Disponible
9
turnos
0
maullidos