—Mnh... que pereza.
No tenía ganas de levantarse, su energía había decaído bastante y, a decir verdad, volver a su rutina de sólo hacer patitos en el estudio era cansino.
No tenía un propósito de nuevo.
Terminaba de vestirse, peinando sus cabellos un poco antes de atarlos en una coleta con una cinta, saliendo de la alcoba para ir directamente a su oficina, recorriendo aquellos oscuros y solitarios pasillos de nuevo.
No tenía ganas de levantarse, su energía había decaído bastante y, a decir verdad, volver a su rutina de sólo hacer patitos en el estudio era cansino.
No tenía un propósito de nuevo.
Terminaba de vestirse, peinando sus cabellos un poco antes de atarlos en una coleta con una cinta, saliendo de la alcoba para ir directamente a su oficina, recorriendo aquellos oscuros y solitarios pasillos de nuevo.
—Mnh... que pereza.
No tenía ganas de levantarse, su energía había decaído bastante y, a decir verdad, volver a su rutina de sólo hacer patitos en el estudio era cansino.
No tenía un propósito de nuevo.
Terminaba de vestirse, peinando sus cabellos un poco antes de atarlos en una coleta con una cinta, saliendo de la alcoba para ir directamente a su oficina, recorriendo aquellos oscuros y solitarios pasillos de nuevo.
