—Pero el mocoso de Dios se freseó... No le pedía nada extraordinario, en fin~

Se encogió de hombros.
—Pero el mocoso de Dios se freseó... No le pedía nada extraordinario, en fin~ Se encogió de hombros.
Me enjaja
1
0 turnos 0 maullidos
Patrocinados
Patrocinados