𝕭𝖊𝖓𝖊𝖆𝖙𝖍 𝖙𝖍𝖊 𝖗𝖆𝖎𝖓
『 Rol Libre. 』
— Ah... comenzó a llover... debemos buscar refugio Spark.... — agregó dirigiéndose al caballo que le hacía compañía para alzar su mirada hacia el cielo que, inevitable y evidentemente aquellas ligeras gotas caían en partículas tan delgadas que parecían pellizcar la piel al impactar.
¿Cuánto tiempo había pasado de haber dejado Jerusalem? No lo sabía, mucho menos la ruta a seguir. Aquel ataque de los sarracenos que les seguían habían logrado su cometido, separar aquel pequeño grupo. Galahad había tomado su propio camino con el Santo Grial en compañía de Sir Bors, pero él, tuvo que luchar usando la misma lanza para poder asegurar ambas: la Lanza del Destino y su vida.
Quizás ya había llegado hasta las tierras galesas o germanas, no lo sabía. Lo único de lo que podía estar seguro era el que ya no le seguían.
— Ah... comenzó a llover... debemos buscar refugio Spark.... — agregó dirigiéndose al caballo que le hacía compañía para alzar su mirada hacia el cielo que, inevitable y evidentemente aquellas ligeras gotas caían en partículas tan delgadas que parecían pellizcar la piel al impactar.
¿Cuánto tiempo había pasado de haber dejado Jerusalem? No lo sabía, mucho menos la ruta a seguir. Aquel ataque de los sarracenos que les seguían habían logrado su cometido, separar aquel pequeño grupo. Galahad había tomado su propio camino con el Santo Grial en compañía de Sir Bors, pero él, tuvo que luchar usando la misma lanza para poder asegurar ambas: la Lanza del Destino y su vida.
Quizás ya había llegado hasta las tierras galesas o germanas, no lo sabía. Lo único de lo que podía estar seguro era el que ya no le seguían.
『 Rol Libre. 』
— Ah... comenzó a llover... debemos buscar refugio Spark.... — agregó dirigiéndose al caballo que le hacía compañía para alzar su mirada hacia el cielo que, inevitable y evidentemente aquellas ligeras gotas caían en partículas tan delgadas que parecían pellizcar la piel al impactar.
¿Cuánto tiempo había pasado de haber dejado Jerusalem? No lo sabía, mucho menos la ruta a seguir. Aquel ataque de los sarracenos que les seguían habían logrado su cometido, separar aquel pequeño grupo. Galahad había tomado su propio camino con el Santo Grial en compañía de Sir Bors, pero él, tuvo que luchar usando la misma lanza para poder asegurar ambas: la Lanza del Destino y su vida.
Quizás ya había llegado hasta las tierras galesas o germanas, no lo sabía. Lo único de lo que podía estar seguro era el que ya no le seguían.
Tipo
Individual
Líneas
Cualquier línea
Estado
Disponible
