–Maldición.

Comentó Billy, viéndose sus manos. Se llevó un dedo al corte que tenía cerca de sus ojos. Se detuvo por un momento al estar corriendo, jadeando con cansancio. Se había lastimado tras haber escapado de alguien. Miró su dedo gordo cuando vio su sangre correr, respirando hondo. Odiaba pelear, y le parecía cobarde cuando las personas se defendían con objetos.
–Maldición. Comentó Billy, viéndose sus manos. Se llevó un dedo al corte que tenía cerca de sus ojos. Se detuvo por un momento al estar corriendo, jadeando con cansancio. Se había lastimado tras haber escapado de alguien. Miró su dedo gordo cuando vio su sangre correr, respirando hondo. Odiaba pelear, y le parecía cobarde cuando las personas se defendían con objetos.
Me gusta
1
0 turnos 0 maullidos
Patrocinados
Patrocinados