Ciao! Benvenuti al centro linguistico.
— La sonrisa de Tsubaki fue impecable.
Como siempre.
Aunque nadie notó cómo su mirada se desvió hacia la ventana,
como buscando algo más allá del aula.
Quizás libertad.
O quizás una moto esperando bajo el sol. —
— La sonrisa de Tsubaki fue impecable.
Como siempre.
Aunque nadie notó cómo su mirada se desvió hacia la ventana,
como buscando algo más allá del aula.
Quizás libertad.
O quizás una moto esperando bajo el sol. —
Ciao! Benvenuti al centro linguistico.
— La sonrisa de Tsubaki fue impecable.
Como siempre.
Aunque nadie notó cómo su mirada se desvió hacia la ventana,
como buscando algo más allá del aula.
Quizás libertad.
O quizás una moto esperando bajo el sol. —

