Ay... bueno, tampoco te emociones tanto.
— Chasqueó la lengua con suavidad, entre dientes, mientras su expresión se tornaba en una mezcla de fastidio y berrinche.—
— Chasqueó la lengua con suavidad, entre dientes, mientras su expresión se tornaba en una mezcla de fastidio y berrinche.—
Ay... bueno, tampoco te emociones tanto.
— Chasqueó la lengua con suavidad, entre dientes, mientras su expresión se tornaba en una mezcla de fastidio y berrinche.—

