✦ 𝐇𝐄𝐑𝐀 ✦
La Reina del Firmamento, portadora del amor sagrado
> Los cielos se abrieron al paso de Hera, cuyos cabellos flotaban como velos de galaxias rotas. En sus manos, el destino danzaba convertido en una paloma de luz, nacida del susurro de antiguas promesas. La diosa no gritó, no juzgó. Solo alzó la mirada hacia el firmamento, y todo lo falso se disolvió ante la verdad que fluía desde su alma. En ese instante, no fue reina, no fue vengadora. Fue amor... en su forma más pura.
> Porque incluso tras mil engaños, tras juramentos rotos y cielos desgarrados por el orgullo... su corazón seguía latiendo con el nombre de Zeus grabado en fuego dorado. No por debilidad, sino por la fuerza eterna de quien elige amar, aun cuando el mundo le pide que no lo haga.
— ❝Que me olviden todos los dioses, si alguna vez dejo de amar con la eternidad que vive en mi pecho... pues hasta el fin de los cielos, mi alma seguirá susurrando su nombre.❞
La Reina del Firmamento, portadora del amor sagrado
> Los cielos se abrieron al paso de Hera, cuyos cabellos flotaban como velos de galaxias rotas. En sus manos, el destino danzaba convertido en una paloma de luz, nacida del susurro de antiguas promesas. La diosa no gritó, no juzgó. Solo alzó la mirada hacia el firmamento, y todo lo falso se disolvió ante la verdad que fluía desde su alma. En ese instante, no fue reina, no fue vengadora. Fue amor... en su forma más pura.
> Porque incluso tras mil engaños, tras juramentos rotos y cielos desgarrados por el orgullo... su corazón seguía latiendo con el nombre de Zeus grabado en fuego dorado. No por debilidad, sino por la fuerza eterna de quien elige amar, aun cuando el mundo le pide que no lo haga.
— ❝Que me olviden todos los dioses, si alguna vez dejo de amar con la eternidad que vive en mi pecho... pues hasta el fin de los cielos, mi alma seguirá susurrando su nombre.❞
✦ 𝐇𝐄𝐑𝐀 ✦
La Reina del Firmamento, portadora del amor sagrado
> Los cielos se abrieron al paso de Hera, cuyos cabellos flotaban como velos de galaxias rotas. En sus manos, el destino danzaba convertido en una paloma de luz, nacida del susurro de antiguas promesas. La diosa no gritó, no juzgó. Solo alzó la mirada hacia el firmamento, y todo lo falso se disolvió ante la verdad que fluía desde su alma. En ese instante, no fue reina, no fue vengadora. Fue amor... en su forma más pura.
> Porque incluso tras mil engaños, tras juramentos rotos y cielos desgarrados por el orgullo... su corazón seguía latiendo con el nombre de Zeus grabado en fuego dorado. No por debilidad, sino por la fuerza eterna de quien elige amar, aun cuando el mundo le pide que no lo haga.
— ❝Que me olviden todos los dioses, si alguna vez dejo de amar con la eternidad que vive en mi pecho... pues hasta el fin de los cielos, mi alma seguirá susurrando su nombre.❞

