𝓛𝓪 𝓿𝓲𝓼𝓲𝓽𝓪
El sol comenzaba a teñir el cielo de tonos naranjas y dorados cuando una pequeña figura alada surcó el aire, zigzagueando entre los árboles con chillidos agudos. Heinrich, en su forma de murciélago, se aproximaba al templo de Kazuo con una mezcla de emoción y nerviosismo, lanzando sus característicos sonidos esperando que su viejo amigo lo reconociera y saliera a recibirlo.
No venía solo.
A unos cuantos kilómetros, pero ya en camino, volaba Malvyna, la imponente dragona de escamas rojizas que lo acompañaría ese atardecer. Se había detenido brevemente al divisar un río cercano; y, fiel a su instinto, había descendido a pescar.
Heinrich se posaba en una de las barandas del jardín interior, agitando las alas con impaciencia. No solo estaba ansioso por ver a Kazuo, sino también curioso por cómo sería ese primer encuentro con su peculiar amiga.
No venía solo.
A unos cuantos kilómetros, pero ya en camino, volaba Malvyna, la imponente dragona de escamas rojizas que lo acompañaría ese atardecer. Se había detenido brevemente al divisar un río cercano; y, fiel a su instinto, había descendido a pescar.
Heinrich se posaba en una de las barandas del jardín interior, agitando las alas con impaciencia. No solo estaba ansioso por ver a Kazuo, sino también curioso por cómo sería ese primer encuentro con su peculiar amiga.
El sol comenzaba a teñir el cielo de tonos naranjas y dorados cuando una pequeña figura alada surcó el aire, zigzagueando entre los árboles con chillidos agudos. Heinrich, en su forma de murciélago, se aproximaba al templo de Kazuo con una mezcla de emoción y nerviosismo, lanzando sus característicos sonidos esperando que su viejo amigo lo reconociera y saliera a recibirlo.
No venía solo.
A unos cuantos kilómetros, pero ya en camino, volaba Malvyna, la imponente dragona de escamas rojizas que lo acompañaría ese atardecer. Se había detenido brevemente al divisar un río cercano; y, fiel a su instinto, había descendido a pescar.
Heinrich se posaba en una de las barandas del jardín interior, agitando las alas con impaciencia. No solo estaba ansioso por ver a Kazuo, sino también curioso por cómo sería ese primer encuentro con su peculiar amiga.
Tipo
Individual
Líneas
5
Estado
Disponible


