Daemyra utilizaba el color verde con orgullo.
A pesar que desde pequeña, su color favorito había sido el rojo, ahora no podía evitar rechazarlo con asco. El rojo se mostraba demasiado del lado de los Negros, por lo cual, ella regaló todas sus prendas de aquél color a sus "amigas" nobles.
☆☆☆☆☆☆
☆ A memory ☆
Una Daemyra de once años se encontraba junto a un Lucerys de doce.
Ambos estaban en Dragonstone, disfrutando del tiempo libre que Alicent le había brindado a la joven princesa.
Sus manos estaban juntas, sus dedos entrelazados.
Las miradas que se dedicaban no eran solo de unos prometidos a futuro de forma política, más bien, de un amor sincero que no veía peligros.
☆ — Había extrañado pasear por la playa junto a ti, Myra. — "Myra". Así la apodaba el joven Lucerys desde que tenían memoria. — Eres una gran compañía.
— He de poder decir lo mismo de ti, Luke. — Daemyra lo miraba con una sonrisa de oreja a oreja. Mentía si decía que ella no estaba enamorada de él, a pesar de su corta edad. — Nuestras caminatas siempre se me hicieron placenteras.
Lucerys de repente se detuvo, soltando la mano de la pequeña Targaryen para posar la suya en la mejilla de ésta. Él dió un paso adelante, dejando sus rostros a tan solo centímetros de distancia.
☆ — Estás hermosa hoy. Quiero decir, siempre lo estás, pero... — Lucerys se había puesto nervioso, cosa que hizo que Daemyra suelte una corta risa. — pero hoy lo estás más.
— Te agradezco, pero, agradecería más que te calles. — Bromeó la peliblanca. Y cuando estuvo apunto de reír, sintió los labios del adolescente Lucerys en los suyos.
Fue un beso dulce, suave y sincero. Sus labios se movían en un compás tierno pero torpe al mismo tiempo. Pues, era el primer beso de ambos.
A pesar que desde pequeña, su color favorito había sido el rojo, ahora no podía evitar rechazarlo con asco. El rojo se mostraba demasiado del lado de los Negros, por lo cual, ella regaló todas sus prendas de aquél color a sus "amigas" nobles.
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☆ A memory ☆
Una Daemyra de once años se encontraba junto a un Lucerys de doce.
Ambos estaban en Dragonstone, disfrutando del tiempo libre que Alicent le había brindado a la joven princesa.
Sus manos estaban juntas, sus dedos entrelazados.
Las miradas que se dedicaban no eran solo de unos prometidos a futuro de forma política, más bien, de un amor sincero que no veía peligros.
☆ — Había extrañado pasear por la playa junto a ti, Myra. — "Myra". Así la apodaba el joven Lucerys desde que tenían memoria. — Eres una gran compañía.
— He de poder decir lo mismo de ti, Luke. — Daemyra lo miraba con una sonrisa de oreja a oreja. Mentía si decía que ella no estaba enamorada de él, a pesar de su corta edad. — Nuestras caminatas siempre se me hicieron placenteras.
Lucerys de repente se detuvo, soltando la mano de la pequeña Targaryen para posar la suya en la mejilla de ésta. Él dió un paso adelante, dejando sus rostros a tan solo centímetros de distancia.
☆ — Estás hermosa hoy. Quiero decir, siempre lo estás, pero... — Lucerys se había puesto nervioso, cosa que hizo que Daemyra suelte una corta risa. — pero hoy lo estás más.
— Te agradezco, pero, agradecería más que te calles. — Bromeó la peliblanca. Y cuando estuvo apunto de reír, sintió los labios del adolescente Lucerys en los suyos.
Fue un beso dulce, suave y sincero. Sus labios se movían en un compás tierno pero torpe al mismo tiempo. Pues, era el primer beso de ambos.
Daemyra utilizaba el color verde con orgullo.
A pesar que desde pequeña, su color favorito había sido el rojo, ahora no podía evitar rechazarlo con asco. El rojo se mostraba demasiado del lado de los Negros, por lo cual, ella regaló todas sus prendas de aquél color a sus "amigas" nobles.
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☆ A memory ☆
Una Daemyra de once años se encontraba junto a un Lucerys de doce.
Ambos estaban en Dragonstone, disfrutando del tiempo libre que Alicent le había brindado a la joven princesa.
Sus manos estaban juntas, sus dedos entrelazados.
Las miradas que se dedicaban no eran solo de unos prometidos a futuro de forma política, más bien, de un amor sincero que no veía peligros.
☆ — Había extrañado pasear por la playa junto a ti, Myra. — "Myra". Así la apodaba el joven Lucerys desde que tenían memoria. — Eres una gran compañía.
— He de poder decir lo mismo de ti, Luke. — Daemyra lo miraba con una sonrisa de oreja a oreja. Mentía si decía que ella no estaba enamorada de él, a pesar de su corta edad. — Nuestras caminatas siempre se me hicieron placenteras.
Lucerys de repente se detuvo, soltando la mano de la pequeña Targaryen para posar la suya en la mejilla de ésta. Él dió un paso adelante, dejando sus rostros a tan solo centímetros de distancia.
☆ — Estás hermosa hoy. Quiero decir, siempre lo estás, pero... — Lucerys se había puesto nervioso, cosa que hizo que Daemyra suelte una corta risa. — pero hoy lo estás más.
— Te agradezco, pero, agradecería más que te calles. — Bromeó la peliblanca. Y cuando estuvo apunto de reír, sintió los labios del adolescente Lucerys en los suyos.
Fue un beso dulce, suave y sincero. Sus labios se movían en un compás tierno pero torpe al mismo tiempo. Pues, era el primer beso de ambos.
