—Qué sueño tan extraño...—De pasó el dorso de la diestra sobre la boca, justo para aliviar el cosquilleo que quedó en sus labios tras despertar de dicho sueño. Sonrojada, se talló el rostro con ambas manos, rematando con un par palmadas sobre las mejillas. Qué bueno que Archer no podía leer la mente o sería un infierno lidiar con él.-
—Qué sueño tan extraño...—De pasó el dorso de la diestra sobre la boca, justo para aliviar el cosquilleo que quedó en sus labios tras despertar de dicho sueño. Sonrojada, se talló el rostro con ambas manos, rematando con un par palmadas sobre las mejillas. Qué bueno que Archer no podía leer la mente o sería un infierno lidiar con él.-


