—Puede que se haya pasado unos cuantos dias tallando minuciosamente ese pequeño pedacito de madera. Y puede que el acabado final no haya sido solo cosa de sus habilidades con el cuchillo de tallar y sí cosa de su magia, pero... al final considera que ha conseguido un buen trabajo (¡Incluso ha aprendido a hacer nudos!). Se acerca hasta la loba, colocándose a su espalda y cerca de su oído dice—
Feliz cumpleaños, lobita...
—Es cuando ella se da la vuelta que RJ amplia una enorme sonrisa y toma la mano femenina para dejar en esta una pequeña pulsera de nudos y cuentas de piedra lunar (la piedra natal de Maya) y en el medio de esta un colgante tallado en madera de un lobo aullando a la luna—
Feliz cumpleaños, lobita...
—Es cuando ella se da la vuelta que RJ amplia una enorme sonrisa y toma la mano femenina para dejar en esta una pequeña pulsera de nudos y cuentas de piedra lunar (la piedra natal de Maya) y en el medio de esta un colgante tallado en madera de un lobo aullando a la luna—
—Puede que se haya pasado unos cuantos dias tallando minuciosamente ese pequeño pedacito de madera. Y puede que el acabado final no haya sido solo cosa de sus habilidades con el cuchillo de tallar y sí cosa de su magia, pero... al final considera que ha conseguido un buen trabajo (¡Incluso ha aprendido a hacer nudos!). Se acerca hasta la loba, colocándose a su espalda y cerca de su oído dice—
Feliz cumpleaños, lobita...
—Es cuando ella se da la vuelta que RJ amplia una enorme sonrisa y toma la mano femenina para dejar en esta una pequeña pulsera de nudos y cuentas de piedra lunar (la piedra natal de Maya) y en el medio de esta un colgante tallado en madera de un lobo aullando a la luna—
