Entre tequila y boleros, aprendí que a veces se llora cantando... y a veces se canta para no llorar. Pero yo, mi amor, prefiero cantar bien alto, con los labios rojos, el alma rota y los tacones bien puestos. Porque si voy a caer, que sea bailando en un bar latino donde el dolor se disfraza de ritmo. Canta y no llores, que aquí nadie vino a ser víctima.
Entre tequila y boleros, aprendí que a veces se llora cantando... y a veces se canta para no llorar. Pero yo, mi amor, prefiero cantar bien alto, con los labios rojos, el alma rota y los tacones bien puestos. Porque si voy a caer, que sea bailando en un bar latino donde el dolor se disfraza de ritmo. Canta y no llores, que aquí nadie vino a ser víctima.
