Podrán cambiar las épocas, los atuendos, los detalles, pero los ojos jamás cambian.
No importa si ha sido una o doce vidas, los ojos jamás cambian.
No importa si ha sido una o doce vidas, los ojos jamás cambian.
Podrán cambiar las épocas, los atuendos, los detalles, pero los ojos jamás cambian.
No importa si ha sido una o doce vidas, los ojos jamás cambian.

