** 5 años antes **
- ¡Pero instructor! ¡Ya le dije que 50 metros de distancia no es nada para mi! Mis tiros usualmente son de 1km para arriba. -
Decía en un tono molesto, completamente aburrida. Quería disparar, claro. Pero aquello no era un entrenamiento ideal para ella. Ella está hecha para cosas más complicadas, ella realmente es una máquina de la puntería.
Sin embargo, el instructor mostraba un rechazo, quería ignorar su talento, quería hacerle sentir menos.
Por lo que Nadia, cuando todos se encontraban prestando atención a la discusión, ahí aprovechó para dar un tiro certero al centro del círculo más pequeño sin siquiera mirar la mirilla.
Esto dejó a todos sorprendidos y al instructor en ridículo. Nadia dejó el arma ahí y simplemente se levantó y salió del lugar de un portazo.
- ¡Pero instructor! ¡Ya le dije que 50 metros de distancia no es nada para mi! Mis tiros usualmente son de 1km para arriba. -
Decía en un tono molesto, completamente aburrida. Quería disparar, claro. Pero aquello no era un entrenamiento ideal para ella. Ella está hecha para cosas más complicadas, ella realmente es una máquina de la puntería.
Sin embargo, el instructor mostraba un rechazo, quería ignorar su talento, quería hacerle sentir menos.
Por lo que Nadia, cuando todos se encontraban prestando atención a la discusión, ahí aprovechó para dar un tiro certero al centro del círculo más pequeño sin siquiera mirar la mirilla.
Esto dejó a todos sorprendidos y al instructor en ridículo. Nadia dejó el arma ahí y simplemente se levantó y salió del lugar de un portazo.
** 5 años antes **
- ¡Pero instructor! ¡Ya le dije que 50 metros de distancia no es nada para mi! Mis tiros usualmente son de 1km para arriba. -
Decía en un tono molesto, completamente aburrida. Quería disparar, claro. Pero aquello no era un entrenamiento ideal para ella. Ella está hecha para cosas más complicadas, ella realmente es una máquina de la puntería.
Sin embargo, el instructor mostraba un rechazo, quería ignorar su talento, quería hacerle sentir menos.
Por lo que Nadia, cuando todos se encontraban prestando atención a la discusión, ahí aprovechó para dar un tiro certero al centro del círculo más pequeño sin siquiera mirar la mirilla.
Esto dejó a todos sorprendidos y al instructor en ridículo. Nadia dejó el arma ahí y simplemente se levantó y salió del lugar de un portazo.

