Sentado en el sillón más cercano a la ventana, con el abrigo aún mal colgado en el respaldo, su cuerpo comenzaba a ceder al cansancio. Los párpados le pesaban, deslizándose poco a poco mientras su cabeza se inclinaba apenas hacia un lado.
En casa, al fin, donde el silencio no le exigía respuestas ni sospechosos, donde la taza en sus dedos era lo único que debía sostener. Un suspiro escapó de él sin querer, mezcla de alivio y agotamiento.
Había sido otro día largo en la comisaría… pero al menos, aquí, podía permitirse cerrar los ojos sin mirar por encima del hombro.
#nightfallrevenge
En casa, al fin, donde el silencio no le exigía respuestas ni sospechosos, donde la taza en sus dedos era lo único que debía sostener. Un suspiro escapó de él sin querer, mezcla de alivio y agotamiento.
Había sido otro día largo en la comisaría… pero al menos, aquí, podía permitirse cerrar los ojos sin mirar por encima del hombro.
#nightfallrevenge
Sentado en el sillón más cercano a la ventana, con el abrigo aún mal colgado en el respaldo, su cuerpo comenzaba a ceder al cansancio. Los párpados le pesaban, deslizándose poco a poco mientras su cabeza se inclinaba apenas hacia un lado.
En casa, al fin, donde el silencio no le exigía respuestas ni sospechosos, donde la taza en sus dedos era lo único que debía sostener. Un suspiro escapó de él sin querer, mezcla de alivio y agotamiento.
Había sido otro día largo en la comisaría… pero al menos, aquí, podía permitirse cerrar los ojos sin mirar por encima del hombro.
#nightfallrevenge

