«Un hombre, visiblemente atormentado, toma asiento frente al médico.
"Me siento muy triste, doctor", explica él. "Nada de lo que hago me hace sentir mejor. Siento que mi vida no tiene sentido."
"Tengo la solución ", el médico replica, sonriente. "Vaya a ver el show del bufón Pagliacci, eso lo hará reír."
"Pero doctor..."
"¡Pagliacci es un jodido perdedor! Véalo ahí, dando lástima, con ese puto maquillaje ridículo, sabiendo que su show sólo continúa porque el dueño del circo no tiene el valor para echar a la calle a ese pedazo de mierda. ¿No es gracioso? ¿No es lo más gracioso que ha escuchado en toda su vida?"
"Doctor... Pero yo soy..."
La mano del médico impide el pronunciar de más palabras. Aferrándose al rostro del hombre como un bozal, mientras la otra sostiene un escalpelo.
"Sé quién eres."»
"Me siento muy triste, doctor", explica él. "Nada de lo que hago me hace sentir mejor. Siento que mi vida no tiene sentido."
"Tengo la solución ", el médico replica, sonriente. "Vaya a ver el show del bufón Pagliacci, eso lo hará reír."
"Pero doctor..."
"¡Pagliacci es un jodido perdedor! Véalo ahí, dando lástima, con ese puto maquillaje ridículo, sabiendo que su show sólo continúa porque el dueño del circo no tiene el valor para echar a la calle a ese pedazo de mierda. ¿No es gracioso? ¿No es lo más gracioso que ha escuchado en toda su vida?"
"Doctor... Pero yo soy..."
La mano del médico impide el pronunciar de más palabras. Aferrándose al rostro del hombre como un bozal, mientras la otra sostiene un escalpelo.
"Sé quién eres."»
«Un hombre, visiblemente atormentado, toma asiento frente al médico.
"Me siento muy triste, doctor", explica él. "Nada de lo que hago me hace sentir mejor. Siento que mi vida no tiene sentido."
"Tengo la solución ", el médico replica, sonriente. "Vaya a ver el show del bufón Pagliacci, eso lo hará reír."
"Pero doctor..."
"¡Pagliacci es un jodido perdedor! Véalo ahí, dando lástima, con ese puto maquillaje ridículo, sabiendo que su show sólo continúa porque el dueño del circo no tiene el valor para echar a la calle a ese pedazo de mierda. ¿No es gracioso? ¿No es lo más gracioso que ha escuchado en toda su vida?"
"Doctor... Pero yo soy..."
La mano del médico impide el pronunciar de más palabras. Aferrándose al rostro del hombre como un bozal, mientras la otra sostiene un escalpelo.
"Sé quién eres."»
