Se removía e la cama como un gato, era extraño pues sabía que había despertado hace un par de horas pero aún seguía sintiendo que no estaba completamente en su cuerpo. Colocó la mano en las gafas que llevaba para quitarlas, era todo un fastidio, ¿Desde cuándo había comenzado a ver la vida de esa mujer?. — Claudia.—
Para él era muy extraño decirlo en voz alta, estaban cortados por las misma tijera pero al mismo tiempo eran tan diferentes, incluso en sus vidas, era de las que expresaba sus sentimientos como una niña, pero él era de mantenerlos a raya por su propio bienestar, aunque ambos cumplían la función de tener el mismo tipo de trabajo, ella era un poco más humana que él, todo esto era confuso, tal vez algo había hecho mal en algún punto o despertado alguna magia antigua.
Tiro los lentes sobre la cama y se dispuso a levantarse, tenía que ir al trabajo, pero era algo extraño, a pesar de que siempre ha sido muy perezoso para ir, por primera vez no quería pisar la oficina, era como si ser quien era le recordara que en otro mundo en el mismo lugar había una pequeña mujer sentada en su lugar. — Tzch..— un sonido de disgusto salió de sus garganta, ¿Por qué tenía que haberse enterado?, se volvió a tirar en la cama y tomó su teléfono para enviarle un texto a su asistente, el mensaje era claro, cancélalo todo por una semana, necesitaba tiempo, tiempo para pensar para entender que era lo que tenía que hacer con la información que poseía.
Para él era muy extraño decirlo en voz alta, estaban cortados por las misma tijera pero al mismo tiempo eran tan diferentes, incluso en sus vidas, era de las que expresaba sus sentimientos como una niña, pero él era de mantenerlos a raya por su propio bienestar, aunque ambos cumplían la función de tener el mismo tipo de trabajo, ella era un poco más humana que él, todo esto era confuso, tal vez algo había hecho mal en algún punto o despertado alguna magia antigua.
Tiro los lentes sobre la cama y se dispuso a levantarse, tenía que ir al trabajo, pero era algo extraño, a pesar de que siempre ha sido muy perezoso para ir, por primera vez no quería pisar la oficina, era como si ser quien era le recordara que en otro mundo en el mismo lugar había una pequeña mujer sentada en su lugar. — Tzch..— un sonido de disgusto salió de sus garganta, ¿Por qué tenía que haberse enterado?, se volvió a tirar en la cama y tomó su teléfono para enviarle un texto a su asistente, el mensaje era claro, cancélalo todo por una semana, necesitaba tiempo, tiempo para pensar para entender que era lo que tenía que hacer con la información que poseía.
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Para él era muy extraño decirlo en voz alta, estaban cortados por las misma tijera pero al mismo tiempo eran tan diferentes, incluso en sus vidas, era de las que expresaba sus sentimientos como una niña, pero él era de mantenerlos a raya por su propio bienestar, aunque ambos cumplían la función de tener el mismo tipo de trabajo, ella era un poco más humana que él, todo esto era confuso, tal vez algo había hecho mal en algún punto o despertado alguna magia antigua.
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