Mueve la pequeña pachita de tabaco en medio de su sábana de arroz, tira con suavidad para crear un cilindro curioso donde sobresale aquella "barriga" en el medio. Obvio, no es uno de sus mejores cigarros, pero tampoco se encuentra de un modo perfeccionista donde requiere que sea todo perfecto.
Por alguna razón su mente una y otra vez regresa a la mujer del día anterior, la bondadosa dragona quien le dio de comer, ¿la volvería a ver? Lo dudaba, parecía ser una viajera quien estaba acompañada de un grupo de aventureros bastante inusual.
En su caso, no quedaba mucho, tenía que continuar su viaje, alejarse más de su tierra, de su hogar, debía evitar poner en riesgo a los suyos con la maldición que cargaba en su ser.
Por alguna razón su mente una y otra vez regresa a la mujer del día anterior, la bondadosa dragona quien le dio de comer, ¿la volvería a ver? Lo dudaba, parecía ser una viajera quien estaba acompañada de un grupo de aventureros bastante inusual.
En su caso, no quedaba mucho, tenía que continuar su viaje, alejarse más de su tierra, de su hogar, debía evitar poner en riesgo a los suyos con la maldición que cargaba en su ser.
Mueve la pequeña pachita de tabaco en medio de su sábana de arroz, tira con suavidad para crear un cilindro curioso donde sobresale aquella "barriga" en el medio. Obvio, no es uno de sus mejores cigarros, pero tampoco se encuentra de un modo perfeccionista donde requiere que sea todo perfecto.
Por alguna razón su mente una y otra vez regresa a la mujer del día anterior, la bondadosa dragona quien le dio de comer, ¿la volvería a ver? Lo dudaba, parecía ser una viajera quien estaba acompañada de un grupo de aventureros bastante inusual.
En su caso, no quedaba mucho, tenía que continuar su viaje, alejarse más de su tierra, de su hogar, debía evitar poner en riesgo a los suyos con la maldición que cargaba en su ser.