- Escuchadme, semidioses. Mis queridos hijos.
Convertíos en lo que deseáis. Ya sea en señores. Ya sea en dioses.
Pero si no lográis convertiros en nada, seréis renegados.
No seréis más que sacrificios...-
Convertíos en lo que deseáis. Ya sea en señores. Ya sea en dioses.
Pero si no lográis convertiros en nada, seréis renegados.
No seréis más que sacrificios...-
- Escuchadme, semidioses. Mis queridos hijos.
Convertíos en lo que deseáis. Ya sea en señores. Ya sea en dioses.
Pero si no lográis convertiros en nada, seréis renegados.
No seréis más que sacrificios...-