- La noche había caido ya y esta sale de su casa alumbrandose el camino con un farol tras recordar que necesitaba algunas hiervas medicinales. Se abrió paso entre la selva y en su camino se encontró con un extraño que parecia deambular así que esta le ofreció posada hasta el amanecer. -

- Al llegar ella acomoda una habitación para darsela. Enseguida le mostro la habitación sentandose en un cojin. Le dice que puede relajarse y tomar un baño, aun sin percatarse de que no le estaba dando privacidad -

Uhm.. Que pasa?, no te pondras comodo?
-sonríe-