Tocaba lamerse las heridas. Este no fué un contrincante ordinario. Este estaba al mismo nivel que el zorro, con un aura igual de potente que la suya. Solo que esta era oscura, tan negra como una noche sin luna. Era como si la tierra y el cielo luchase por ver quién protagonizaba el horizonte. [darkurge13] había pintado el bosque de Kazuo con el rojo carmesí aún caliente de los seres que protege con devoción. Se había atrevido a mancillarlo con su putrefacta presencia su hogar. Ambos habían salido mal parados en su primer encuentro. ¿Que será lo que les deparará en el futuro?