— Era una obra de arte. Esa belleza, el simulacro perfecto de la bruja que yo había visto a la luz de las velas en la capilla, no necesitaba opciones no conjuros para apoyar si causa. Era un ser perfecto e íntimamente magnífico.—
— Era una obra de arte. Esa belleza, el simulacro perfecto de la bruja que yo había visto a la luz de las velas en la capilla, no necesitaba opciones no conjuros para apoyar si causa. Era un ser perfecto e íntimamente magnífico.—