Nesta había viajado hasta la Casa de [High.Lord], de los tres implicados en las recientes disputas la Alta Fae era la última que se había pronunciado ante Rhysand, en parte por que tenía cierto miedo a lo que pudiera pasar y en parte por que le daba una extrema vergüenza aceptar todo aquello. Había pasado por el pasillo de la entrada, y se había parado largos minutos a revisar las pinturas que Feyre había pintado, en especial se había parado sobre su propio retrato, ¿Esa era ella? ¿Tan seria? ¿Tan fría? Sí, esa era ella, custodiando la entrada del hogar de su familia, custodiando el hogar de la persona a la que, actualmente, más deseaba proteger, Nyx. Tras unos eternos minutos, que perfectamente pudieron ser una hora revisando el museo de arte que era la casa de su hermana, llamó con cuidado al despacho de Rhysand, no iba a verle en calidad de cuñado o familia, iba a verle en calidad de Alto Lord, y por eso mismo iba vestida como una Valkyria. - Rhysand, soy Nesta... Me preguntaba si... podría tener unas palabras contigo. Nesta esperó pacientemente a que el Alto Lord respondiera, era libre de enviarla a freír espárragos, la verdad.