*Sentada en una silla, mira al cielo nocturno. Los niños ya dormian y Jormun tenía una cena importante. Por eso, Ate se encontraba sola, sumida en sus pensamientos. Recuerda la primera vez que conoció a su suegro. Y sonrie con cariño. Jormun se lo presentó un día de finales de otoño. Loki fue muy amable con ella, pero Ate sabía que la estaba analizando. Con el tiempo, el dios del engaño, cogió cariño a su nuera y Ate ya no solo lo consideraba su suegro, sino también un buen amigo. Con la llegada de sus pequeños, Loki se sentía muy feliz de ser abuelo. Y los niños lo consideraban su abuelo favorito, aunque también querían mucho a Zeus. Ate mira al cielo estrellado y una voz conocida la saca de sus pensamientos. Es Jormun. Abraza a su esposa y juntos entraron en casa *