Estaba Bastante cansado de todo antes de haber llegado a este nuevo mundo estaba a punto de Rendirse y de caer en la locura eterna del infierno aceptando su destino de sufrimiento debido a los pecados cometidos en vida, simplemente era lo que creía que debía padecer al punto en el que cuando distintos overlords llegaban a atacarlo no se defendía, destrozando poco a poco su cuerpo esperando lograr acabar con aquella farsa que le hacía sufrir.

Sorprendentemente sus heridas habían estado Sanando con el paso de los días en el nuevo infierno y su calidad de sueño había mejorado.

—¿porqué?...

Apenas sí le dirigía la palabra al soberano Lucifer pero extrañamente sentía una calidez cada que pensaba en él.