— con @[Adaman] En la sala de su casa, está listo para un mañana de negocios mientras se masajea las sienes tras lentes de sol ahumados y escucha a sus socios, hablar. -Creemos que vale la pena viajar hasta Yamanashi y comprobar si este sujeto está diciéndonos la verdad- Matsuri sopesa las opciones mientras asiente y sobre su juguito. En su cruzada mística, la promesa de encontrar un "algo" que puede manipular el tiempo, sonaba demasiado bueno para ser verdad. Pero ¿y si lo era? ¿Y si exagerar cualidades en un mundo tan escéptico era la mejor protección para la magia? Sonaba a que debia hacer un viaje a tierras natales, asi que debia dejar todo listo en su ausencia. —¿Cuánto nos costará este viaje?- Matsuri pregunta mientras sobre de su juguito de Matcha. -Pues, si dejas a cargo a Randazzo como tu reemplazo en la compañía no creo que haya problemas de gastos ya que él esta al...- el pelón iba a seguir hablando, cuando de reojo vio el culo de un muchacho(?), pasar por entre las paredes vidriadas del jardin interno. Matsuri se percata de que el sexy Adamán está distrayendo a sus socios, con su belleza en pijama (?) pero trata de no distraerse también. — Descuiden, no es un fantasma, es Cokito.- Cierra la carpeta de negocios y la regresa a sus dos compañeros laborales. —Bien, hablaré con Randazzo, pero nadie mas debe saber de esto,o las acciones bajaran. ? Nos veremos en la cena de esta noche.- Los hombres se retiran de su casa y Matsuri suspira pesadamente, derritiendose en la silla