#BitchLife
Despertó tarde, como de costumbre, pero esta vez no fue en su cama.
Sus ojos se entreabren, luchando contra la luz tenue que entra por la ventana. El sonido de la ducha lo alerta y una sensación de pánico lo recorre. Su cabeza late con fuerza, la resaca castigando cada pensamiento mientras se incorpora. Mira alrededor, reconociendo de inmediato que este no es su departamento.
--- Joder… otra vez ---refunfuña sin alzar la voz, frotándose la cara con una mano temblorosa.
Sin perder tiempo, se apura a vestirse, recogiendo su ropa esparcida por el suelo. Mientras se abotona los pantalones, intenta no hacer ruido. Su único objetivo es desaparecer antes de que el dueño de la casa salga del baño. No quiere saber quién es, ni qué idioteces hizo la noche anterior bajo el efecto de las recreativas que claramente se le fueron de las manos.
Con la boca seca y el pulso acelerado, escapa por la puerta, prometiéndose, como cada vez, que esta será la última.
Despertó tarde, como de costumbre, pero esta vez no fue en su cama.
Sus ojos se entreabren, luchando contra la luz tenue que entra por la ventana. El sonido de la ducha lo alerta y una sensación de pánico lo recorre. Su cabeza late con fuerza, la resaca castigando cada pensamiento mientras se incorpora. Mira alrededor, reconociendo de inmediato que este no es su departamento.
--- Joder… otra vez ---refunfuña sin alzar la voz, frotándose la cara con una mano temblorosa.
Sin perder tiempo, se apura a vestirse, recogiendo su ropa esparcida por el suelo. Mientras se abotona los pantalones, intenta no hacer ruido. Su único objetivo es desaparecer antes de que el dueño de la casa salga del baño. No quiere saber quién es, ni qué idioteces hizo la noche anterior bajo el efecto de las recreativas que claramente se le fueron de las manos.
Con la boca seca y el pulso acelerado, escapa por la puerta, prometiéndose, como cada vez, que esta será la última.
#BitchLife
Despertó tarde, como de costumbre, pero esta vez no fue en su cama.
Sus ojos se entreabren, luchando contra la luz tenue que entra por la ventana. El sonido de la ducha lo alerta y una sensación de pánico lo recorre. Su cabeza late con fuerza, la resaca castigando cada pensamiento mientras se incorpora. Mira alrededor, reconociendo de inmediato que este no es su departamento.
--- Joder… otra vez ---refunfuña sin alzar la voz, frotándose la cara con una mano temblorosa.
Sin perder tiempo, se apura a vestirse, recogiendo su ropa esparcida por el suelo. Mientras se abotona los pantalones, intenta no hacer ruido. Su único objetivo es desaparecer antes de que el dueño de la casa salga del baño. No quiere saber quién es, ni qué idioteces hizo la noche anterior bajo el efecto de las recreativas que claramente se le fueron de las manos.
Con la boca seca y el pulso acelerado, escapa por la puerta, prometiéndose, como cada vez, que esta será la última.