🌸-Conforme caía la oscuridad en aquel octubre mágico, mi transformación en kitsune se volvía más incontrolable. Perdida en el bosque, desperté confundida cerca de un claro, percatándome de un cambio repentino. Mis orejas de zorro habían desaparecido, señal de que mis poderes y energía espiritual se habían esfumado. Mareada y desnuda de mis dones, avisté un sendero hacia el retorno. Acepté mi fragilidad temporal, sabiendo que debía sobrevivir como una simple mortal durante dos días. Mi refugio sería el santuario, ocultando mi verdadera esencia hasta que el ciclo se completara. En mi nueva forma, observé al mundo con ojos humanos, sintiendo la vulnerabilidad mezclada con una libertad desconocida.