Jeff The Killer se despertó esa mañana con una caja negra y brillante frente a la puerta de su casa. El remitente era nada menos que Jack Skellington . Al verla, Jeff esbozó su clásica sonrisa torcida. ¿Un regalo de Jack? Esto va a ser interesante... —susurró, arrancando la cinta con impaciencia. Dentro de la caja había un pequeño muñeco de esqueleto, muy acorde al estilo de Jack, junto con una nota que decía: "Para Jeff, espero que disfrutes el toque especial de Halloween". — Qué tierno , —dijo con sarcasmo mientras inspeccionaba el muñeco—. No es exactamente mi estilo, pero... ya veremos qué hace. Apenas dejó el muñeco en una repisa de su casa, las luces comenzaron a parpadear. Las sombras en las paredes se alargaron, y un frío espectral llenó el aire. —Pero qué... —Jeff se detuvo, sintiendo que algo andaba mal. De repente, los muebles comenzaron a moverse por sí solos. Las ventanas se cerraron de golpe y las puertas crujieron como si alguien o algo las empujara desde el otro lado. — Meh....no es mi pedo....que lo vea slendy si la casa esta embrujada— no es su casa asi que le valia realmente #Inkfest Dia 4