—¿¡Y así quieren que socialice con la chusma!? ¡Ese hijo de gata me vomitó encima el muy sorete!

De milagro había dejado vivo a ese gato, ganas de arrancarle la piel de tajo no le quedaron pero prefirió irse, bañarse como un frenético hasta casi acabar gris en vez de morado y tratar de no destruir media torre.

Lo de la torre falló, había dejado un caos a su paso pero estaba justificado.
No sólo le interrumpieron su reconciliación con Vox, terminó con cientos de cucarachines de magia vudú extraña encima, arañado, mordiqueado y, encima, vomitado.
Joyita de día y, para colmo, todo por el estúpido rey de pacotilla que ahora estaba en forma de gato también.

—Como a ese imbécil de mierda se le ocurra vomitarme una bola de pelo, se acabó...
—¿¡Y así quieren que socialice con la chusma!? ¡Ese hijo de gata me vomitó encima el muy sorete! De milagro había dejado vivo a ese gato, ganas de arrancarle la piel de tajo no le quedaron pero prefirió irse, bañarse como un frenético hasta casi acabar gris en vez de morado y tratar de no destruir media torre. Lo de la torre falló, había dejado un caos a su paso pero estaba justificado. No sólo le interrumpieron su reconciliación con Vox, terminó con cientos de cucarachines de magia vudú extraña encima, arañado, mordiqueado y, encima, vomitado. Joyita de día y, para colmo, todo por el estúpido rey de pacotilla que ahora estaba en forma de gato también. —Como a ese imbécil de mierda se le ocurra vomitarme una bola de pelo, se acabó...
Me enjaja
2
20 turnos 0 maullidos 209 vistas
Patrocinados
Patrocinados