Finalmente volvió al palacio, pero sin poder encontrar el cuerpo de su esposo, sin saber donde habría terminado o donde su gema estaba, por lo que estaba cada vez más preocupado, sumando al agotamiento. Llevaba a su bebé consigo, la gema, incluso la gran cadena aún arrastrando y extendida por kilómetros que lo unía a Vox. —[Drag0n]... Lo llamó, elevando la mirada, esperando a su aparición para mostrarle la gema y a su hija. —Necesito... que busques por [Undertarker] y le digas que no encontré a Alastor. Que tengo la gema y a mi hija... y que ocupo de su ayuda para poder unirlas. Es urgente, debes hacerlo rápido... Más que una orden, era una suplica, pues sabía que el tiempo era limitado y él no era capaz de unir la gema al cuerpo. Con la idea atormentándolo de haber perdido a su esposo, no quería también perder a su retoño.