Qué extraño y familiar al mismo tiempo, qué complejo y a la vez tan sencillo mirarte a los ojos y ver que todavía nos entendemos sin necesidad de palabras... 
  Qué extraño y familiar al mismo tiempo, qué complejo y a la vez tan sencillo mirarte a los ojos y ver que todavía nos entendemos sin necesidad de palabras... 
  
  
  
  
 