No es por presumir, pero la patada al pecho que le ha dado al pelele de madera y paja lo ha impactado contra el suelo y tal vez le haya separado la cabeza del cuerpo.
—Ese muñeco era demasiado flojo.—gruñe mientras, con desaprobación, empieza a reconstruirlo.
—Ese muñeco era demasiado flojo.—gruñe mientras, con desaprobación, empieza a reconstruirlo.
No es por presumir, pero la patada al pecho que le ha dado al pelele de madera y paja lo ha impactado contra el suelo y tal vez le haya separado la cabeza del cuerpo.
—Ese muñeco era demasiado flojo.—gruñe mientras, con desaprobación, empieza a reconstruirlo.
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