Jormun y Ate se fueron de vacaciones con sus cuatro hijos a Micronesia. El resot pertenecía al ex de Ate, Wolfat, que al conocer al marido de ella, los celos lo comieron por dentro. Desde que rompió con ella hace doscientos años, no dejaba en pesar en la diosa del Caos y eso que tenia a muchas mujeres a su disposición. Cosa contrario a Ate, solo quería pasar una vacaciones en familia y que los niños conocieran esa parte del mundo. Los pequeños lo pasaban genial entre diversas actividades infantiles, paseos por la playa con sus padres, juegos, los cuatro niños terminaban agotados en la cama. Cosa que Jormun y Ate aprovechaban para tener intimidad como matrimonio que son.