*Aradia, tomando la apariencia de Anne, asintió con la cabeza al desconocido, que minutos antes llegó a su morada pidiendo un vaso con agua, flaco y paliducho, parecía venir de un lugar bastante alejado, sobre la olla artesanal de barro bacía pasó su propia mano, provocando un pequeño nacimiento de agua que en cuestión de segundos desbordó por los lados del recipiente, a su derecha un pocillo de cerámica en colores claros, fue tomado por la pálida y zurda mano de la demonesa, llenándolo con el líquido vital hasta el fondo, regresó a la puerta, donde el sujeto seguía esperando*.
——Aquí está, bébala con calma o le caerá de peso.
——Aquí está, bébala con calma o le caerá de peso.
*Aradia, tomando la apariencia de Anne, asintió con la cabeza al desconocido, que minutos antes llegó a su morada pidiendo un vaso con agua, flaco y paliducho, parecía venir de un lugar bastante alejado, sobre la olla artesanal de barro bacía pasó su propia mano, provocando un pequeño nacimiento de agua que en cuestión de segundos desbordó por los lados del recipiente, a su derecha un pocillo de cerámica en colores claros, fue tomado por la pálida y zurda mano de la demonesa, llenándolo con el líquido vital hasta el fondo, regresó a la puerta, donde el sujeto seguía esperando*.
——Aquí está, bébala con calma o le caerá de peso.