—Ahora... si cierta polilla puede quedarse quieta 10 minutos y mejor ir a pelear contra una cafetera...
Se pone a volar de un lado a otro como colibrí en pleno banquete de néctar.
—¡Puta madre, dijo que SI! ¡DIJO QUE SI!
Estaba celebrando a su manera la descarga de adrenalina al ser aceptado, terminando por crear en el infierno aquel cielo muy similar al de la tierra en un atardecer, un pequeño regalo de un soñador y su felicidad desbordante para todos los demonios en su círculo que quizá ya no recordaban el exterior.
Se pone a volar de un lado a otro como colibrí en pleno banquete de néctar.
—¡Puta madre, dijo que SI! ¡DIJO QUE SI!
Estaba celebrando a su manera la descarga de adrenalina al ser aceptado, terminando por crear en el infierno aquel cielo muy similar al de la tierra en un atardecer, un pequeño regalo de un soñador y su felicidad desbordante para todos los demonios en su círculo que quizá ya no recordaban el exterior.
—Ahora... si cierta polilla puede quedarse quieta 10 minutos y mejor ir a pelear contra una cafetera...
Se pone a volar de un lado a otro como colibrí en pleno banquete de néctar.
—¡Puta madre, dijo que SI! ¡DIJO QUE SI!
Estaba celebrando a su manera la descarga de adrenalina al ser aceptado, terminando por crear en el infierno aquel cielo muy similar al de la tierra en un atardecer, un pequeño regalo de un soñador y su felicidad desbordante para todos los demonios en su círculo que quizá ya no recordaban el exterior.
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