—Se ha sobresaltado y dejado de tararear de golpe. Está escuchando los gritos de una mujer. Entonces recordó lo que Alastor le pidió:

"No importa lo que oigas"

Tragó saliva y tomó de nuevo el cepillo del cerdito, tratando de distraerse e incluso se puso a cantar, pero con cada nuevo grito, su voz se volvía más temblorosa. Finalmente se acurrucó en un rincón, tapándose los oídos—
—Se ha sobresaltado y dejado de tararear de golpe. Está escuchando los gritos de una mujer. Entonces recordó lo que Alastor le pidió: "No importa lo que oigas" Tragó saliva y tomó de nuevo el cepillo del cerdito, tratando de distraerse e incluso se puso a cantar, pero con cada nuevo grito, su voz se volvía más temblorosa. Finalmente se acurrucó en un rincón, tapándose los oídos—
Me entristece
1
0 turnos 0 maullidos
Patrocinados
Patrocinados