Los días posteriores a la batalla entre Xellos y Gaudy pudieron considerarse tranquilos. Dolorosos y tristes también, pero tranquilos a fin de cuentas.

Sin embargo parecía que el destino estaba abocado a destruir esa tranquilidad.

Aquella mañana mientras Ameria se desperezaba sobre la cama, una paloma blanca literalmente traspasó los cristales de su ventana.

Eso significaba que se trataba de una paloma nacida por invocación mágica.

Las palomas mágicas eran el medio que normalmente utilizaban los hechiceros para enviarse mensajes.

Era el medio de comunicación más efectivo pues era muy rápido y no era necesario saber la ubicación del destinatario, simplemente el ave sería capaz de encontrarle.

Ameria se acercó a la paloma y comprobó que llevaba un sobre atado en una de sus patas. El sobre estaba cerrado mediante un lacre con el emblema oficial de Saillune, su reino natal.

Ameria supo de inmediato que algo importante debía de estar ocurriendo en su reino.

Apresuradamente abrió el sobre y extrajo el pergamino.



"Su Alteza Real, Ameria Wil Tesla Saillune,

Con profunda tristeza, me dirijo a usted para informarle de la grave enfermedad que aqueja a su padre, el Príncipe Philionel. Su salud ha decaído considerablemente en los últimos días, y los médicos temen por su vida.

Su Alteza, en estos momentos tan difíciles, también nos vemos abocados a una grave crisis política. Los territorios más allá del Desierto de la Destrucción han estado realizando movimientos militares inusuales, reuniendo tropas y armamento especialmente en sus fronteras.

Se rumorea que planean declarar la guerra a los territorios que han estado durante el último milenio bajo la barrera Mazoku, aunque se desconocen los motivos de tal decisión. Hasta el momento no son más que preocupantes rumores para los que debemos de prepararnos.

La situación es crítica, y se requiere su presencia en Saillune de forma inmediata para que asuma la regencia del trono.

Su liderazgo y sabiduría son esenciales para tomar las decisiones que asegurarán la paz y la seguridad de nuestro reino.

Le rogamos que regrese con la mayor celeridad posible. El futuro de Saillune quizá penda de un hilo.

Con mis más sinceros respetos,

Philippe.
Gran Canciller de Saillune."



Tras leer aquella carta, Ameria se dejó caer sobre la cama y la carta cayó al suelo desde sus manos.

¿Su padre gravemente enfermo y los territorios bajo la Barrera Mazoku a punto de entrar en guerra? Aquello tenía que ser una pesadilla.

Hacía unos tres años que Reena había destruido al Mazoku Hellmaster Phibrizzo. Su destrucción vino acompañada de la caída de la Barrera Mazoku.

La Barrera Mazoku era un campo de fuerza mágico que había sellado completamente una parte de las tierras en el mundo de Slayers. Nadie del exterior podía entrar a los territorios bajo la Barrera Mazoku, y nadie de ningún territorio bajo la Barrera Mazoku podía salir de esa barrera.

La barrera fue erigida hace mil años por los Mazoku durante la Guerra de la Caída del Mal, para evitar que los otros subordinados del Dios Flare Dragon Ceiphied o sus siervos interfieran mientras que los Mazoku luchaban contra el Dios Aqualord Ragradia y los dragones bajo su mando.

Se requirió de enormes cantidades de energía para mantener la barrera, la cual fue suministrada por Greater Beast Zelas Metallium, Deep Sea Dolphin, Dynast Grausherra y Hellmaster Phibrizzo. Cada uno de ellos estacionados en posiciones estratégicas en torno a la barrera.

Después de la guerra, probablemente a causa del resultado incierto del conflicto, el campo de fuerza se mantuvo en su lugar, al menos hasta que tuvo lugar la destrucción de Hellmaster Phibrizzo un milenio después a manos de Reena.

Desde que cayó la Barrera Mazoku los Reinos e Imperios que habían estado bajo ella, habían tratado de iniciar relaciones con los reinos externos: relaciones diplomáticas, de alianza, amistad, comercio... No tenía sentido que se estuviera gestando una guerra.

Y además, la repentina enfermedad del Príncipe Philionel, regente de Saillune, ponía de manifiesto que algo extraño estaba ocurriendo.

En cualquier caso, Ameria, aun siendo muy joven, estaba preparada para asumir la regencia de Saillune.

Era cierto que Ameria tenía una hermana mayor, Gracia, pero desde la muerte de su madre a manos de un asesino, Gracia abandonó el reino de Saillune y no regresó nunca, por lo que la regencia correspondía a Ameria.

Ameria suspiró. Debía de romper la promesa que le hizo a Zelgadiss de ayudarle a ir en busca de una cura para su humanidad.

Saillune, su reino, la necesitaba ahora más que nunca.



Nota: En comentarios hay mapas adjuntos.


© Imagen de Ameria creada por [Reena]
Los días posteriores a la batalla entre Xellos y Gaudy pudieron considerarse tranquilos. Dolorosos y tristes también, pero tranquilos a fin de cuentas. Sin embargo parecía que el destino estaba abocado a destruir esa tranquilidad. Aquella mañana mientras Ameria se desperezaba sobre la cama, una paloma blanca literalmente traspasó los cristales de su ventana. Eso significaba que se trataba de una paloma nacida por invocación mágica. Las palomas mágicas eran el medio que normalmente utilizaban los hechiceros para enviarse mensajes. Era el medio de comunicación más efectivo pues era muy rápido y no era necesario saber la ubicación del destinatario, simplemente el ave sería capaz de encontrarle. Ameria se acercó a la paloma y comprobó que llevaba un sobre atado en una de sus patas. El sobre estaba cerrado mediante un lacre con el emblema oficial de Saillune, su reino natal. Ameria supo de inmediato que algo importante debía de estar ocurriendo en su reino. Apresuradamente abrió el sobre y extrajo el pergamino. "Su Alteza Real, Ameria Wil Tesla Saillune, Con profunda tristeza, me dirijo a usted para informarle de la grave enfermedad que aqueja a su padre, el Príncipe Philionel. Su salud ha decaído considerablemente en los últimos días, y los médicos temen por su vida. Su Alteza, en estos momentos tan difíciles, también nos vemos abocados a una grave crisis política. Los territorios más allá del Desierto de la Destrucción han estado realizando movimientos militares inusuales, reuniendo tropas y armamento especialmente en sus fronteras. Se rumorea que planean declarar la guerra a los territorios que han estado durante el último milenio bajo la barrera Mazoku, aunque se desconocen los motivos de tal decisión. Hasta el momento no son más que preocupantes rumores para los que debemos de prepararnos. La situación es crítica, y se requiere su presencia en Saillune de forma inmediata para que asuma la regencia del trono. Su liderazgo y sabiduría son esenciales para tomar las decisiones que asegurarán la paz y la seguridad de nuestro reino. Le rogamos que regrese con la mayor celeridad posible. El futuro de Saillune quizá penda de un hilo. Con mis más sinceros respetos, Philippe. Gran Canciller de Saillune." Tras leer aquella carta, Ameria se dejó caer sobre la cama y la carta cayó al suelo desde sus manos. ¿Su padre gravemente enfermo y los territorios bajo la Barrera Mazoku a punto de entrar en guerra? Aquello tenía que ser una pesadilla. Hacía unos tres años que Reena había destruido al Mazoku Hellmaster Phibrizzo. Su destrucción vino acompañada de la caída de la Barrera Mazoku. La Barrera Mazoku era un campo de fuerza mágico que había sellado completamente una parte de las tierras en el mundo de Slayers. Nadie del exterior podía entrar a los territorios bajo la Barrera Mazoku, y nadie de ningún territorio bajo la Barrera Mazoku podía salir de esa barrera. La barrera fue erigida hace mil años por los Mazoku durante la Guerra de la Caída del Mal, para evitar que los otros subordinados del Dios Flare Dragon Ceiphied o sus siervos interfieran mientras que los Mazoku luchaban contra el Dios Aqualord Ragradia y los dragones bajo su mando. Se requirió de enormes cantidades de energía para mantener la barrera, la cual fue suministrada por Greater Beast Zelas Metallium, Deep Sea Dolphin, Dynast Grausherra y Hellmaster Phibrizzo. Cada uno de ellos estacionados en posiciones estratégicas en torno a la barrera. Después de la guerra, probablemente a causa del resultado incierto del conflicto, el campo de fuerza se mantuvo en su lugar, al menos hasta que tuvo lugar la destrucción de Hellmaster Phibrizzo un milenio después a manos de Reena. Desde que cayó la Barrera Mazoku los Reinos e Imperios que habían estado bajo ella, habían tratado de iniciar relaciones con los reinos externos: relaciones diplomáticas, de alianza, amistad, comercio... No tenía sentido que se estuviera gestando una guerra. Y además, la repentina enfermedad del Príncipe Philionel, regente de Saillune, ponía de manifiesto que algo extraño estaba ocurriendo. En cualquier caso, Ameria, aun siendo muy joven, estaba preparada para asumir la regencia de Saillune. Era cierto que Ameria tenía una hermana mayor, Gracia, pero desde la muerte de su madre a manos de un asesino, Gracia abandonó el reino de Saillune y no regresó nunca, por lo que la regencia correspondía a Ameria. Ameria suspiró. Debía de romper la promesa que le hizo a Zelgadiss de ayudarle a ir en busca de una cura para su humanidad. Saillune, su reino, la necesitaba ahora más que nunca. Nota: En comentarios hay mapas adjuntos. © Imagen de Ameria creada por [Reena]
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