Mansión de las 4 estaciones, China.-
Era una tarde tranquila, un tono rosado pintó el firmamento dando un bello aspecto que hacia juego con los hermosos petalos de cerezos que habían brotado entre la anterior época invernal llenando de perfumes el ambiente; un joven taosita conocido en el mundo del cultivo como la suave brisa y luna brillante, pues para muchos eso representaba el mejor alumno de la gran maestra Baoshan Sanren.
Un joven muy tranquilo y amable pero con un sólido corazón y determinación con grandes deseos de justicia y ayudar al prójimo.
Tiempo atrás se encontró en la sorpresa de estar viviendo a lado del joven delincuente Xue Yang, el cual había detsruido no solo un clan completo, sino tambien algunos otros cultivadores; aun con todo esto Xiao Xingchen se dió a la tarea de escucharlo y pedirle que dejara todo aquello y le perdonó, empezando a vivir juntos hasta casarse y vivir juntos, ahora tenian su propia secta, jovenes huerfanos y enseñandoles el buen camino.
Esa tarde, quiso dar un paseo por los alrededores de la secta y quedarse a contemplar el paisaje*
Era una tarde tranquila, un tono rosado pintó el firmamento dando un bello aspecto que hacia juego con los hermosos petalos de cerezos que habían brotado entre la anterior época invernal llenando de perfumes el ambiente; un joven taosita conocido en el mundo del cultivo como la suave brisa y luna brillante, pues para muchos eso representaba el mejor alumno de la gran maestra Baoshan Sanren.
Un joven muy tranquilo y amable pero con un sólido corazón y determinación con grandes deseos de justicia y ayudar al prójimo.
Tiempo atrás se encontró en la sorpresa de estar viviendo a lado del joven delincuente Xue Yang, el cual había detsruido no solo un clan completo, sino tambien algunos otros cultivadores; aun con todo esto Xiao Xingchen se dió a la tarea de escucharlo y pedirle que dejara todo aquello y le perdonó, empezando a vivir juntos hasta casarse y vivir juntos, ahora tenian su propia secta, jovenes huerfanos y enseñandoles el buen camino.
Esa tarde, quiso dar un paseo por los alrededores de la secta y quedarse a contemplar el paisaje*
Mansión de las 4 estaciones, China.-
Era una tarde tranquila, un tono rosado pintó el firmamento dando un bello aspecto que hacia juego con los hermosos petalos de cerezos que habían brotado entre la anterior época invernal llenando de perfumes el ambiente; un joven taosita conocido en el mundo del cultivo como la suave brisa y luna brillante, pues para muchos eso representaba el mejor alumno de la gran maestra Baoshan Sanren.
Un joven muy tranquilo y amable pero con un sólido corazón y determinación con grandes deseos de justicia y ayudar al prójimo.
Tiempo atrás se encontró en la sorpresa de estar viviendo a lado del joven delincuente Xue Yang, el cual había detsruido no solo un clan completo, sino tambien algunos otros cultivadores; aun con todo esto Xiao Xingchen se dió a la tarea de escucharlo y pedirle que dejara todo aquello y le perdonó, empezando a vivir juntos hasta casarse y vivir juntos, ahora tenian su propia secta, jovenes huerfanos y enseñandoles el buen camino.
Esa tarde, quiso dar un paseo por los alrededores de la secta y quedarse a contemplar el paisaje*
