Una noche más en ciudad Pentagrama, una noche más en la qué Ángel debería estar trabajando pero, qué sin embargo alegando estar enfermo, decidió quedarse en su habitación ¿Por que? Pues por que era una de esas noches tan especiales qué solo sucedían una o dos veces al mes en las qué recibía una visita muy especial. Y no, no se trataba de ningún cliente, a fin de cuentas en el hotel tenía prohibido el sexo y más con fines lucrativos. Si no qué, esperaba a un buen amigo.
Uno qué venía de otro plano existencial única y exclusivamente, para hacer una pequeña reunión de autocuidado, juegos de mesa, cotilleos y puede qué algo de cine. Incluso si estaban de muchos ánimos quizá hasta salían de parranda a algún local. Fuere como fuere, aquellas noches eran las más divertidas para Ángel y las qué más le permitían evadirse de su miserable existencia. Por que con Xellos, no había máscaras, no había mentiras (salvo alguna pequeña omisión de la realidad) pero, podía ser él mismo. Así qué la araña ya lo tenía todo preparado para la visita. Hasta el pequeño Fat Nuggets, su cerdito diabólico parecía ansioso pues Xellos también le agradaba.
[Xellos]
Uno qué venía de otro plano existencial única y exclusivamente, para hacer una pequeña reunión de autocuidado, juegos de mesa, cotilleos y puede qué algo de cine. Incluso si estaban de muchos ánimos quizá hasta salían de parranda a algún local. Fuere como fuere, aquellas noches eran las más divertidas para Ángel y las qué más le permitían evadirse de su miserable existencia. Por que con Xellos, no había máscaras, no había mentiras (salvo alguna pequeña omisión de la realidad) pero, podía ser él mismo. Así qué la araña ya lo tenía todo preparado para la visita. Hasta el pequeño Fat Nuggets, su cerdito diabólico parecía ansioso pues Xellos también le agradaba.
[Xellos]
Una noche más en ciudad Pentagrama, una noche más en la qué Ángel debería estar trabajando pero, qué sin embargo alegando estar enfermo, decidió quedarse en su habitación ¿Por que? Pues por que era una de esas noches tan especiales qué solo sucedían una o dos veces al mes en las qué recibía una visita muy especial. Y no, no se trataba de ningún cliente, a fin de cuentas en el hotel tenía prohibido el sexo y más con fines lucrativos. Si no qué, esperaba a un buen amigo.
Uno qué venía de otro plano existencial única y exclusivamente, para hacer una pequeña reunión de autocuidado, juegos de mesa, cotilleos y puede qué algo de cine. Incluso si estaban de muchos ánimos quizá hasta salían de parranda a algún local. Fuere como fuere, aquellas noches eran las más divertidas para Ángel y las qué más le permitían evadirse de su miserable existencia. Por que con Xellos, no había máscaras, no había mentiras (salvo alguna pequeña omisión de la realidad) pero, podía ser él mismo. Así qué la araña ya lo tenía todo preparado para la visita. Hasta el pequeño Fat Nuggets, su cerdito diabólico parecía ansioso pues Xellos también le agradaba.
[Xellos]